Por Erik Kirschbaum
BERLÍN (Reuters) - El partido conservador alemán Unión Social Cristiana (CSU por sus siglas en alemán), un socio menor de la coalición de la canciller Angela Merkel, quiere cerrar la ruta del mar Mediterráneo para inmigrantes enviándoles de vuelta a África en vez de permitirles quedarse en Europa.
Como reacción al ataque de un camión el 19 de diciembre en Berlín, el partido hermano bávaro de los Demócratas Cristianos de Merkel ha redactado un documento pidiendo un cambio en las políticas que permiten a los refugiados rescatados de embarcaciones en peligro que permanezcan en Europa.
El CSU se ha quejado durante mucho tiempo de la política de puertas abiertas de Merkel que permitió que entraran en Alemania en torno a 1,1 millones de refugiados de Siria, Irak, Afganistán y de otras partes del mundo desde mediados de 2015. Ignorando sus objeciones, insiste en un límite de 200.000 refugiados al año.
El ataque de la semana pasada en Berlín, en el que un solicitante de asilo de Túnez mató a 12 personas, ha avivado temores en Alemania ante la posibilidad de que haya más amenazas entre los refugiados.
Con unas elecciones programadas en septiembre, el CSU está preocupado por perder votos ante el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD por sus siglas en alemán) que mantiene una posición dura contra los refugiados y ha culpado directamente a las políticas de Merkel del ataque.
"El automatismo de que todos los refugiados son llevados a Europa necesita frenarse", dice el documento interno de los diputados del CSU en el Parlamento, citado por el diario Rheinische Post. "Esta es la única manera de frenar el crimen organizado del Mediterráneo".
La propuesta del CSU no es nueva. El ministro del Interior Thomas de Maiziere, un líder en el CDU de Merkel, propuso en octubre devolver a los inmigrantes a África donde sus peticiones de asilo en la UE pueden ser estudiadas como antídoto al lucrativo negocio del tráfico de personas.
El ministerio de Maiziere dijo que no había planes concretos o discusiones a nivel de la UE sobre la propuesta.
En una reunión en Bruselas el 15 de diciembre, la UE dijo que estaba buscando acuerdos de inmigración a cambio de dinero para frenar las entradas desde África a través del Mediterráneo. El bloque también ha reforzado el control de sus fronteras exteriores y está intentando deportar a más gente que ha llegado a Europa pero que no tiene opciones de asilo.
Sin embargo, continúan las divisiones sobre cómo deberían compartir la carga de aceptar a aquellas personas que ya están en la UE.
Se calcula que un récord de 5.000 inmigrantes se han ahogado en el mar Mediterráneo este año, dijeron la semana la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la agencia de Naciones Unidas para los refugiados ACNUR. Casi 3.800 inmigrantes murieron en el mar durante todo 2015, según cifras de la OIM.
Los datos de la OIM muestran que 358.403 inmigrantes y refugiados habían entrado a Europa por mar en 2016 hasta el 21 de diciembre incluido, la mayoría llegando a Grecia e Italia.