WASHINGTON (Reuters) - Senadores estadounidenses mostraron el miércoles voluntad para considerar restricciones a la venta de armas tras la masacre en un club nocturno gay en Orlando, mientras que el probable candidato republicano a la presidencia Donald Trump dijo estar dispuesto a discutir medidas limitadas de control.
Los republicanos y la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) están bajo una fuerte presión para responder a la peor masacre en la historia moderna de Estados Unidos. Trump dijo que se reuniría con la NRA para discutir formas de impedir que personas que aparecen en listas por presunta relación con grupos terroristas compren armas.
El Senado comenzó a discutir una ley para impedir la venta de armas a cientos de miles de personas que aparecen en listas asociadas al terrorismo después de que un hombre que había estado en esos listados matara a 49 individuos el fin de semana.
El líder republicano del Senado Mitch McConnell instó a los legisladores a ofrecer ideas sobre cómo prevenir otro ataque como el de Orlando.
"No creo que este haya sido un acto de violencia al azar. Parece claro que fue un asesinato a sangre fría cometido por un terrorista que eligió sus víctimas con malicia deliberada", dijo McConnell el miércoles. Un día antes había sostenido que "nadie quiere que los terroristas tengan armas".
Trump anunció su plan de reunirse con la NRA a través de Twitter. Su campaña no especificó qué respaldo podría dar a un proyecto legislativo sobre el tema, mientras que una portavoz declinó dar detalles sobre el momento o la naturaleza del encuentro con la asociación.
Trump había manifestado hasta ahora en la campaña hacia la Casa Blanca que respaldaba la protección de los derechos relacionados con las armas.