Por Marianna Parraga y Ernest Scheyder
HOUSTON (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visitó Texas el martes para evaluar los daños causados por la tormenta tropical Harvey, la priemra gran catástrofe natural que afronta desde que llegó al poder, en momentos en que las lluvias seguían cayendo sobre Houston y decenas de miles de personas huían de sus casas.
La tormenta que gira lentamente sobre el Golfo de México ha causado inundaciones catastróficas en Texas, la muerte de al menos 13 personas y la paralización de Houston, la cuarta ciudad más poblada de Estados Unidos.
Los responsables de la ciudad preparaban refugios de emergencia para unas 19.000 personas. El martes por la mañana, cerca de 50.000 hogares sufrieron daños por inundaciones, dijeron funcionarios de Texas, y la cifra aumentará.
El alcalde de Houston, Sylvester Turner, anunció un toque de queda entre las 00.00 y las 05.00 hora local en medio de informaciones sobre saqueos, robos a mano armada y personas que se hicieron pasar por agentes de policías.
Casi una tercera parte del condado de Harris, con una población de 4,6 millones de habitantes, estaba bajo el agua, un área 15 veces mayor que la de Manhattan, según el periódico Houston Chronicle.
Harvey ha afectado a casi una quinta parte de la capacidad de refino estadounidense, lo que generó preocupaciones sobre una escasez de combustible e hizo que los futuros de la gasolina treparan a un máximo de dos años.
Los residentes en un radio a 2,4 kilómetros de una planta química en Crosby recibieron la orden de evacuar, debido al riesgo creciente de una explosión y posterior fuga.
Trump pidió en Corpus Christi, cerca de la zona donde Harvey tocó tierra el viernes como el huracán más poderoso en azotar Texas en más de 50 años, un esfuerzo ejemplar de ayuda.
"Esto fue de una proporción épica. Nadie había visto algo así", dijo Trump sobre la tormenta tropical, cuando se reunió con funcionarios estatales y federales para una reunión informativa.
Las 13 muertes confirmadas incluyen una familia de seis personas y el sargento de la policía de Houston Steve Perez, un veterano de 34 años que se ahogó mientras intentaba ir a trabajar el domingo, dijo a la prensa el jefe de policía Art Acevedo.
El ojo de la tormenta se encontraba el martes por la noche en el Golfo de México a unos 150 kilómetros al sureste del centro de Houston, y se espera que Harvey vuelva a tocar tierra el miércoles cerca de la frontera entre Luisiana y Texas.