Por Jeff Mason y William James
BIARRITZ, Francia (Reuters) - El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, dijo el domingo que él y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, estaban "entusiasmados" ante la idea de cerrar un tratado comercial posterior al Brexit.
Sin embargo, Johnson advirtió que Estados Unidos sería un duro negociador y que él no apresuraría las conversaciones.
Trump prometió un gran tratado comercial con el Reino Unido para cuando abandone la Unión Europea, la cual afirmó ha sido una carga para los británicos a la hora de llegar a un buen acuerdo.
Ante la delicada tarea de apaciguar a los aliados europeos sin enfurecer a Trump en la cumbre del G7 en Francia, Johnson dijo que había enormes oportunidades para las empresas británicas en el mercado estadounidense, pero insinuó que hay diferencias entre las dos partes sobre el alcance del acuerdo.
Además, añadió, Washington tendría que suavizar algunas de sus políticas "proteccionistas".
"Quieren tenerlo listo para dentro de un año, me encantaría tenerlo para dentro de un año, pero ese es un cronograma muy rápido", dijo Johnson a Sky News.
Previamente, antes una reunión de los dos líderes centrada en el comercio, Trump dijo que deseaba discutir sobre grandes cifras con Johnson.
"Vamos a cerrar un acuerdo comercial muy grande, más grande de lo que jamás hemos tenido con Reino Unido", dijo Trump. "En algún momento (...) dejarán de tener tener grilletes en los tobillos, porque eso es lo que tenían."
Londres quiere un acuerdo de libre comercio integral con Estados Unidos, según altos cargos del Gobierno de Reino Unido, mientras que algunas fuentes oficiales estadounidenses, incluido el asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, han hablado de un enfoque sector por sector.
Cuando Johnson dijo que Londres y Washington llegarían a un "acuerdo fabuloso", Trump lo interrumpió para decir: "un montón de mini-acuerdos fabulosos, estamos hablando de muchos acuerdos diferentes, pero estamos pasando un buen rato".
(Redactado por Richard Lough; Traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdynia)