1 abr (Reuters) - Un ayudante del alcalde de Mariúpol dijo el viernes que la ciudad asediada del sur de Ucrania seguía cerrada para cualquiera que intentara entrar y era "muy peligrosa" para cualquiera que intentara salir.
Petro Andryushchenko dijo que las fuerzas rusas habían impedido desde el jueves que incluso la más mínima cantidad de suministros humanitarios llegara a los residentes atrapados, dejando claro que no se había abierto el "corredor humanitario" previsto.
"La ciudad sigue cerrada a la entrada y es muy peligroso salir con transporte personal", dijo en la aplicación de mensajería Telegram.
"Además, desde ayer los ocupantes no han permitido categóricamente ninguna ayuda humanitaria -incluso en pequeñas cantidades- en la ciudad".
Un convoy de autobuses que partió el jueves hacia Mariúpol no llegó a la ciudad, según informaron las autoridades ucranianas el jueves por la noche.
El alcalde de Mariúpol dijo esta semana que hasta 170.000 residentes estaban atrapados allí sin electricidad y con suministros cada vez más escasos.
Los repetidos intentos de organizar corredores de seguridad han fracasado, y las dos partes se culpan mutuamente. Rusia niega haber atacado a civiles en su asalto a Ucrania, que comenzó el 24 de febrero.
El gobernador de la región de Luhansk, en el este de Ucrania, dijo por separado que esperaba que el viernes se abrieran cinco corredores seguros a pueblos y ciudades de su región.
(Reporte de Natalia Zinets, edición de Timothy Heritage, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)