Por Lucila Sigal
(Reuters) - Un indígena huitoto del Amazonas colombiano protagoniza un corto presentado en el Festival de Cine de Mar del Plata que recorre las ruinas de la mansión abandonada del fallecido hombre de las drogas Evaristo Porras Ardila, mientras evoca el sometimiento que vivió su comunidad durante el apogeo del narcotráfico.
"El Laberinto" es una película de 21 minutos de la directora y artista colombiana Laura Huertas Millán, quien reside desde hace años en Francia.
Este filme, exhibido previamente en el Festival de Toronto, es parte de una retrospectiva de seis cortos que están siendo presentados en el evento cinematográfico de la ciudad balnearia argentina, donde además Huerta Millán es jurado de la sección competitiva "Estados Alterados" que comenzó este año.
"En mis trabajos les he dado espacio a personajes que son considerados como 'otro', mujeres, indígenas, que son considerados como minorías, que no lo son necesariamente. Me interesa hablar de procesos de mestizaje, de identidades fluidas, que es algo que me va llevando a diferentes temas", dijo en una entrevista con Reuters.
La directora, cuyas obras han sido expuestas en el ICA (OTC:ICAYY) de Londres y el Centro Pompidou, contó que mientras realizaba una investigación sobre arquitectura y poder descubrió las ruinas de la casa de Porras, construida como una réplica de la utilizada en la telenovela "Dinastía" y conoció a un miembro de la comunidad huitoto cuyo nombre se reservó.
"La comunidad huitoto fue muy atacada por el narcotráfico porque los narcotraficantes instalaron un sistema de producción de la cocaína extremadamente violento para las comunidades locales y, al mismo tiempo, él haciendo parte de esta comunidad también hizo parte de quienes trabajaban para estos narcos", agregó.
"Entonces me interesaba esa oposición entre varios mundos. La película presenta las ruinas de esta casa, evoca la historia de esta casa, pero poco a poco se va centrando cada vez más en la figura del narrador", comentó la autora de 35 años.
El filme empieza a hablar de la época en que esa zona del Amazonas estaba gobernada por narcotraficantes, luego muestra la mansión en su máximo esplendor y posteriormente imágenes de la ruina y de la telenovela estadounidense "Dinastía", mientras el narrador circula entre los espacios de la selva y de la casa.
Porras, quien murió en la miseria en 2010 después de cumplir una condena por enriquecimiento ilícito y narcotráfico, mantuvo el poder político durante años en la zona de Leticia, la capital del departamento colombiano fronterizo con Brasil y Perú.
"El narrador cuenta justamente que los capataces tomaban el poder en estas situaciones y que si uno reclamaba lo que le debían, pues, ellos los mandaban a matar", dijo Huertas Millán, quien es investigadora de Harvard.
Otro de los cortos que la realizadora presentó en el festival de cine, que se celebra hasta el próximo sábado, se llama "La Libertad" y trata sobre la familia Navarro de tejedoras de la comunidad zapoteca de México.
"En el caso de las tejedoras me interesaba una cuestión muy etnográfica. La técnica que ellas usan, que se llama telar de cintura, existe desde antes de la llegada de los españoles y fue transmitida de generación en generación por las mujeres (...) Para mí son archivos alternativos de una historia que se construyó desde un cierto punto de vista", contó.
En su trabajo destacan series que denomina "ficciones etnográficas", una mezcla de documental y ficción con la que explora temas que van desde el cuestionamiento a la historia oficial del pasado colonial, el retrato de grupos vulnerables hasta historias personales como la que exhibe en "Sol Negro".
(Información de Lucila Sigal; Editado por Silene Ramírez )