MADRID (Reuters) - Si el triunfo en la Copa del Rey del Atlético de Madrid en 2013 fue asombroso y el título de Liga en la 2013-14 sorprendente, pocos arquearían una ceja si el conjunto de Diego Simeone consigue otro gran título este año.
El Atlético ha estado pendiente de sus asuntos, mientras los dos grandes españoles, Real Madrid y Barcelona han pinchado en las últimas semanas.
El equipo de Simeone está igualado a puntos con el campeón, el Barcelona, tras 15 partidos de Liga, mientras el Real Madrid se ha quedado en tercer lugar a 5 puntos de distancia.
El club rojiblanco, caracterizado por una férrea defensa, talentosos mediocentros como Koke o Yannick Carrasco y habilidosos delanteros como Antoine Griezmann, buscará unirse al Barcelona en los octavos de final en el partido contra el Reus del próximo jueves.
Para esta eliminatoria deberían tener pocos problemas para derrotar a un tercera división al que ya ganaron por 2-1 en la ida.
El Atlético también está en la ronda de octavos de final de la Champions League, quedó líder de grupo y se cruzará con el equipo holandés del PSV Eindhoven.
"Tenemos que estar ahí arriba y molestar, y si se confunden los dos grandes, aprovecharlo", aseguró Simeone tras la victoria por 2-1 en la última jornada ante el Athletic de Bilbao, al que remontaron el gol inicial de Laporte.
El gran inicio de campaña de los rojiblancos se debe en parte al gran estado de forma de Griezmann, que ha marcado ocho goles en Liga y otros cuatro en Champions, con Simeone convirtiéndolo en una de las mejores promesas en una realidad y uno de las mayores amenazas atacantes a nivel europeo.
"Sabemos que Griezmann es un jugador único y que cuando toca un balón va para dentro seguro porque tiene una eficacia brutal", dijo el centrocampista Saúl Ñíguez, que marcó el gol del empate ante el Athletic.