Por Gul Yousafzai
QUETTA, Pakistán (Reuters) - Un suicida con una bomba mató el lunes al menos a 63 personas e hirió a decenas más en Pakistán durante un ataque contra un hospital de Quetta, dijeron responsables de la capital de la violenta provincia de Baluchistán.
La bomba explotó mientras más de 100 personas, principalmente abogados y periodistas, se agolpaban en la zona de urgencias del hospital para acompañar el cuerpo de Bilal Anwar Kasi, un prominente abogado que fue asesinado a tiros en la ciudad fronteriza horas antes, dijo a Reuters Faridullah, un periodista que estaba en el lugar.
Abdul Rehman Miankhel, un alto cargo del hospital estatal donde tuvo lugar la explosión, dijo a periodistas que al menos 63 personas murieron y hubo más de 50 heridos, un aumento desde las cifras iniciales.
"Hay muchos heridos, de modo que la cifra de muertos puede aumentar", dijo Rehmat Saleh Baloch, el ministro de Sanidad de la provincia.
Las imágenes de televisión en el lugar mostraron escenas de caos con personas huyendo entre escombros y humo en los pasillos de la zona de emergencias del hospital.
El motivo detrás del ataque no estaba claro y ningún grupo ha reivindicado aún su responsabilidad, pero varios abogados han sido objetivos en una reciente serie de muertes en Quetta.
La víctima más reciente, Bilal Anwar Kasi, murió tiroteado cuando iba camino al área de tribunales de justicia de la ciudad, dijo a Reuters la policía. El atentado suicida del lunes parecía estar dirigido a sus dolientes, afirmó Anwar ul Haq Kakar, portavoz del Gobierno de Baluchistán.
La policía acordonó el hospital tras la explosión. Además de una campaña insurgente y de las tensiones sectarias, Baluchistán también se ha visto afectada por un incremento de los niveles de criminalidad.
En enero, un suicida con bomba mató a 15 personas frente a un centro de lucha contra la polio en un ataque reivindicado por los talibanes de Pakistán y Jundullah, otro grupo islamista que ha prometido lealtad al Estado Islámico en Oriente Próximo.
Quetta también está considerada como una base de los talibanes afganos, donde sus líderes han celebrado regularmente reuniones en el pasado.
En mayo, el líder de los talibanes afganos, Mullah Akhtar Mansour, murió por el ataque de un dron estadounidense mientras viajaba a Quetta desde la frontera con Irán.