VIENA (Reuters) - La elección presidencial de Austria estaba demasiado ajustada para dar un ganador el domingo, lo que significa que los votos por correo terminarán decidiendo si un candidato euroescéptico y antiinmigración se convierte en el primer jefe de Estado de extrema derecha de la Unión Europea.
Una victoria del candidato del Partido por la Libertad, Norbert Hofer, marcaría un nuevo hito en el resurgimiento de la extrema derecha de Europa, que ha capitalizado la crisis migratoria y la extendida insatisfacción con los partidos tradicionales.
Sería aún más destacable por el hecho que esto ocurra en un país próspero, con bajo desempleo, donde dos partidos centristas han dominado la escena tras el fin de la Segunda Guerra Mundial y su anexión por la Alemania nazi en 1938.
"La soberanía ha hablado", dijo el rival de Hofer, el ex líder de los Verdes Alexander van der Bellen, al canal ORF. "Mañana por la tarde veremos qué ha dicho exactamente".
Una proyección del instituto SORA del canal ORF, basado en el 100 por ciento de los votos depositados y una estimación del resultado del sufragio por correo, mostró un empate de un 50 por ciento para cada uno. El margen de error era de 0,7 puntos porcentuales.
Los resultados provisionales del Ministerio del Interior, que no incluyen los votos por correo, indicaron que Hofer estaba en cabeza con un 51,9 por ciento, comparado con el 48,1 por ciento de Van der Bellen.
Los sufragios enviados por vía postal no serán contados hasta el lunes y su número exacto es desconocido. Esta opción suele ser usada por los sectores más educados, según un portavoz de SORA, un grupo entre los que Van der Bellen, de 72 años, tiene un mayor apoyo.
El ministro del Interior, Wolfgang Sobotka, afirmó que estima que habrá unos 750.000 votos por correo, cerca del 12 por ciento de los 6,4 millones de electores austriacos.