PEKÍN, 27 mar (Reuters) - El presidente chino Xi Jinping dijo a su homólogo estadounidense Donald Trump durante una conversación telefónica el viernes que contaría con el apoyo de China en la lucha contra el coronavirus, mientras Estados Unidos se enfrenta a la perspectiva de convertirse en el próximo epicentro mundial de la pandemia.
Xi también dijo que espera que Estados Unidos tome medidas sustanciales para mejorar los lazos bilaterales, señalando que la cooperación entre sus países era la única alternativa, según una versión de la conversación publicada por el Ministerio de Exteriores chino.
Estados Unidos tienen ahora el mayor número de casos de coronavirus del mundo, con 84.946 infecciones y 1.259 muertes. Los hospitales de ciudades como Nueva York y Nueva Orleans se están encontrando con dificultades para hacer frente a la oleada de pacientes.
La oferta de asistencia de Xi se produjo después del prolongado intercambio de acusacioness entre Pekín y Washington sobre diversas cuestiones, entre ellas la epidemia de coronavirus.
Trump y otros altos cargos de Estados Unidos han acusado a China de falta de transparencia respecto al virus, que ha matado a más de 24.000 personas en todo el mundo, además de llamar a veces al patógeno "el virus de China", lo que ha enfurecido a la potencia asiática.
Según dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Xi reiteró a Trump durante la conversación que China había sido abierta y transparente sobre la epidemia, que ha infectado a más de 80.000 personas en China.
Por su parte, Trump dijo en Twitter que habló con Xi sobre el brote de coronavirus "con gran detalle".
"China ha sufrido mucho y ha desarrollado una profunda comprensión del virus", dijo Trump. "Estamos trabajando muy estrechamente. ¡Mucho respeto!"
La Organización Mundial de la Salud ha dicho que es previsible que Estados Unidos, que ha registrado 17.099 nuevos casos confirmados de coronavirus y 281 muertes en las últimas 24 horas, se convierta en el epicentro de la pandemia.
CHINA RECORTA VUELOS
Al igual que los hospitales de Estados Unidos, el sistema médico de China tuvo dificultades para contener el coronavirus hace apenas dos meses, pero los draconianos aislamientos de ciudades y las severas restricciones a los viajes han hecho que la epidemia haya disminuido drásticamente en China.
El viernes la China continental comunicó su primer caso de coronavirus de transmisión interna en tres días y 54 nuevos casos importados, mientras Pekín ordenaba a las compañías aéreas que redujeran drásticamente los vuelos internacionales, por temor a que los viajeros puedan reavivar el brote de coronavirus.
Los 55 nuevos casos del jueves suponen un descenso respecto a los 67 del día anterior, según dijo la Comisión Nacional de Salud en un comunicado el viernes, lo que eleva el número de casos confirmados a 81.340, mientras que cinco nuevas muertes elevan el número de víctimas a 3.292.
La provincia de Hubei, con una población de unos 60 millones de habitantes, donde apareció el virus por primera vez a finales del año pasado, no comunicó ningún caso nuevo el jueves, un día después de levantar el aislamiento y reabrir sus fronteras ante la mejoría de la situación.
Shanghái, por su parte, registró la mayor cantidad de nuevos casos importados, con 17, seguida de 12 en la provincia meridional de Guangdong y cuatro en la capital Pekín y en la cercana ciudad de Tianjin. Shanghái tiene ahora 125 pacientes que llegaron del extranjero, incluidos 46 de Reino Unido y 27 de Estados Unidos.
En este sentido, desde el domingo China ha ordenado a sus aerolíneas que operen solo una ruta a cada país, en un solo vuelo cada semana. Las aerolíneas extranjeras deben cumplir con restricciones similares en los vuelos a China, aunque muchas ya habían interrumpido los servicios. [nL4N2BJ03R]
Alrededor del 90% de los actuales vuelos internacionales a China se suspenderán, reduciendo las llegadas a 5.000 pasajeros al día, frente a las 25.000 previas, según dijo el regulador de la aviación civil a última hora del jueves.
A partir del sábado, China suspenderá temporalmente la entrada de extranjeros con visados y permisos de residencia válidos, como medida provisional, añadió el Ministerio de Asuntos Exteriores.
Antes de las nuevas restricciones, los extranjeros constituían una décima parte de los 20.000 viajeros que llegan cada día en vuelos internacionales, según dijo un responsable de la Administración Nacional de Inmigración de China en una reunión informativa la semana pasada.
(Información de Se Young Lee y Lusha Zhang; traducido por Tomás Cobos)