El oro se encuentra perdiendo posiciones el martes, ubicándose en los 1.276 dólares la onza (XAU/USD). El metal ha generado una lateralización con definición bajista desde abril pasado y la debilidad actual confirma dicha vulnerabilidad, por lo que permanecemos cautelosos y a la espera de nuevas bajas rumbo a la zona de mínimos de 1.260-1.265 dólares en una primera instancia y 1.245-1.240 dólares luego, accediendo al objetivo de pos-triangulo para que desde allí la tendencia alcista quede reanudada rumbo a zonas superiores.
El soporte clave de mediano y largo plazo se ubica junto a los mínimos de 1200-1180 dólares la onza y desde donde las subas deberán ser finalmente retomadas, caso contrario, el ajuste en cuestión se ampliara buscando hacer piso en los 1100-1050 dólares.
Deberemos ver un quiebre directo por encima de lo 1.310 en una primera instancia y 1.340 dólares luego para poder descartar cualquier debilidad mayor y pasar a sugerir alzas adicionales de regreso a los 1.390 dólares y rumbo a valores más ambiciosos para adelante.
La secuencia de Fibonacci es armónica en el 2014 con lo cual es factible pensar que en este año vemos un piso para el metal. Por ahora consideramos a la baja actual como parte de un recorte transitorio y que luego del mismo la tendencia alcista deberá ser finalmente reanudada.
En caso en que el ajuste se amplíe, veremos nuevas debilidades hacia soportes inferiores arriba mencionados, pero ello implicara una oportunidad de compra importante en este año y para los años siguientes.
