El trading en índices se ha convertido en una actividad francamente complicada en las últimas semanas. Una gran incertidumbre planea sobre los mercados y los selectivos principales han optado por moverse en unos rangos laterales de magnitud absurda, haciendo que plantear estrategias a medio plazo se convierta en una actividad compleja y, en general, incluso no recomendable, debido a las grandes probabilidades de no acertar en las previsiones.
En determinados índices, sin embargo, como es el caso del Ibex 35, este movimiento lateral ha tenido lugar en la zona baja del rango de cotización de los últimos meses, lo que hace que, aunque el análisis de escenarios sea difícil, la gestión del riesgo sea muy atractiva.
El soporte clave en este caso serían los 8.545 puntos, por lo que el stop tendría sentido en la zona de los 8.500 puntos. Se podría plantear una entrada instantánea o quizá esperar un acercamiento al soporte, pero optando por un volumen bajo acotaríamos la potencial pérdida en caso de rotura del soporte y aseguraríamos la entrada en caso de que el índice experimente un impulso alcista súbito.