Puede que aún queden un par de semanas de 2018, pero al ir finalizando el año, todas las miradas están ya en 2019. Aquí hay tres aspectos clave que impactarán en los precios del petróleo en los primeros meses del nuevo año.
1. Producción de la OPEP y Rusia
La semana pasada, los productores de la OPEP y sus socios no miembros de la OPEP decidieron reducir ligeramente la producción de petróleo, en 1,2 millones de barriles al día con respecto a los niveles de octubre. En realidad, esto se traduce en una gran reducción de Arabia Saudí, que realmente produce 350.000 barriles al día más en noviembre que en octubre. Irán será capaz de mantener la producción en niveles estables —si puede, porque su producción en realidad ha descendido en 31.000 barriles al día en noviembre.
Si los proveedores de petróleo de la OPEP respetan el acuerdo, que es poco probable, la producción total del petróleo de la OPEP ascenderá a 32,214 millones de barriles al día en enero, lo que supone una reducción de sólo 866.000 barriles al día con respecto a la producción de noviembre. Después de que la OPEP anunciara este acuerdo de reducción, los precios subieron ligeramente antes del cierre, un claro indicio de que estas reducciones —incluso combinadas con la contribución adicional de 400.000 barriles al día en recortes de los productores no miembros de la OPEP— no son suficientes para impulsar los precios. ¿Será suficiente esta reducción para mantener los precios estables en 2019? Si no hay más reducciones de la producción en alguna otra parte, parece poco probable.
2. Las sanciones de Irán
Estados Unidos otorgó unas exenciones a las reducciones a ocho países importadores de petróleo iraní en noviembre. Estas exenciones se revisarán en abril y la gran pregunta es si se renovarán, se reducirán o se revocarán del todo. Estas exenciones representan un mínimo de 850.000 barriles al día del suministro de petróleo. No se trata de una gran cantidad, teniendo en cuenta que la industria mundial de petróleo produce unos 100 millones de barriles de petróleo al día. Sin embargo, en el mercado petrolero de hoy, esta cantidad es lo suficientemente significativa como para impactar en los precios.
Países miembros y no miembros de la OPEP se reunirán en abril para evaluar las reducciones de producción, en parte porque Estados Unidos va a revisar las exenciones en ese momento. Podríamos tener alguna pista sobre la ampliación de las exenciones de Estados Unidos más allá de abril en la inminente revisión de la exención de 45 días concedida a Irak para importar gas natural iraní.
El gas natural iraní proporciona a Irak el 50% de su electricidad. Durante su visita del 11 de diciembre, el secretario de energía de Estados Unidos Rick Perry instó a Irak a desarrollar otras fuentes de energía y diversificar sus fuentes de gas natural. No ofreció ningún fondo por parte de Estados Unidos para ayudar a Irak con esta cuestión, pero alentará a las compañías estadounidenses a invertir en infraestructura de energía iraquí.
Irak planea enviar una delegación a Estados Unidos para presionar para conseguir una extensión de su exención. La decisión formal sobre esta exención de gas natural indicará cómo planea Estados Unidos proceder con las exenciones de petróleo ya otorgadas a partir de abril. Eliminar las exenciones en abril haría subir los precios del petróleo si la OPEP y Rusia no deciden también frenar sus reducciones.
3. Producción de petróleo de Estados Unidos
Estados Unidos es ahora mismo el mayor productor de petróleo del mundo. Los últimos datos de la AIE revelaron que Estados Unidos alcanzó un nuevo récord en septiembre, con una producción de 11,5 millones de barriles al día. Esta tendencia continuó en noviembre; la AIE calcula unos 11,5 millones de barriles al día.
La semana pasada, Estados Unidos también era técnicamente un exportador neto de petróleo crudo y combustible, aunque esta semana se revirtió esa tendencia. En lo que respecta a 2019, la AIE prevé que la producción estadounidense ascenderá a una media de 12,1 millones de barriles al día. El crecimiento de la producción podría verse lastrado por la guerra comercial, las subidas de los tipos de interés y las limitaciones de infraestructura.
Sin embargo, los indicios apuntan a que al menos un importador chino reanudará sus compras de crudo de Estados Unidos a partir de marzo. También hay algunos rumores de que la Reserva Federal de Estados Unidos no subirá los tipos de interés en 2019 ni de lejos tan agresivamente como en 2018. Menos subidas de tipos contribuirán a dirigir el flujo de inversión a las empresas de petróleo de esquisto en 2019.