Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
La actividad que hemos observado hoy en el mercado de divisas ha dejado vislumbrar a los inversores parte de la volatilidad que les espera esta semana. El euro, la libra, el franco suizo y los dólares australiano, neozelandés y canadiense han perdido posiciones con respecto al billete verde, con los precios del petróleo cayendo un 3%.
Tras las enormes ganancias de la semana pasada, el último repunte de las divisas principales ha hecho plantearse a muchos inversores si tocarán techo en breve. Básicamente, el EUR, el AUD, el CAD y el NZD deberían descender aunque el aumento del interés por el riesgo y la reversión de los precios de las materias primas han permitido a todas estas divisas desafiar los fundamentos y registrar nuevos máximos. Aún es prematuro decir que se ha tocado techo, ya que la tendencia no se ha revertido y un par de divisas como el EUR/USD se mantiene por encima del nivel clave de 1,1050 pero hay suficientes acontecimientos de riesgo de primera clase en la agenda de esta semana como para que los fundamentos vuelvan a pesar. Aunque el centro de todas las miradas va a ser el anuncio de política monetaria de la Reserva Federal, hay otros tres bancos centrales que publicarán también sus decisiones sobre política monetaria. Además, el Banco de la Reserva de Australia publicará las actas de su última reunión esta noche, seguido de un informe sobre ventas minoristas en EE.UU. el martes, las cifras sobre empleo del Reino Unido el miércoles, el PIB de Nueva Zelanda y las cifras sobre empleo de Australia el jueves y finalmente las ventas minoristas de Canadá el viernes.
Podemos ver que los inversores están comprando Índice dólar a la espera del anuncio sobre política monetaria de la Reserva Federal. Aunque no se espera que la Fed suba los tipos de interés, hay muchas posibilidades de que Janet Yellen afirme que aún se baraja una subida de los tipos en 2016.
En vista de las últimas medidas de relajación implementadas por el BCE y el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda, la sola idea de que se lleve a cabo una subida de los tipos de Estados Unidos ha atraído y debería seguir atrayendo flujos hacia el dólar. Durante las últimas semanas, hemos observado un gran debilitamiento del billete verde debido a la recuperación de los valores y las materias primas así como el aumento del interés por el riesgo. Las divisas y las materias primas se han visto sobrecargadas en relación con el billete verde, y el anuncio del FOMC podría ser el catalizador que revierta estas tendencias.
Pero primero tenemos el informe sobre ventas minoristas de Estados Unidos, que se publica mañana y que no tiene pinta de ir a beneficiar al dólar. Según el Consejo Internacional de Centros Comerciales, el crecimiento del consumo se ha ralentizado durante el mes de febrero y el reciente descenso de los salarios no respalda una recuperación de los niveles de consumo, lo que podría explicar por qué los economistas esperan el mayor descenso de las ventas minoristas de todo un año. Un descenso del consumo no debería cambiar las previsiones de la Fed pero podría bastar para que el USD/JPY descienda hasta el nivel de 113,00, lo que sería un nivel muy apropiado para comprar antes del anuncio del FOMC.
Durante el fin de semana, China ha registrado cifras poco alentadoras sobre producción industrial y sobre consumo. Aunque los traders europeos no se han inmutado ante las noticias, los estadounidenses han hecho desplomarse los dólares australiano y neozelandés. Las actas de la reunión del Banco de la Reserva de Australia se publican esta noche y aunque parecen ligeramente más preocupados por la inflación, no han mostrado inquietud alguna acerca de la reciente ralentización de la demanda de Asia y la pronunciada caída de los datos sobre empleo de Australia.
La actitud de indiferencia ante la economía o los problemas de la región proporcionará un respaldo subyacente a la divisa. La caída de los precios de las materias primas también ha contribuido al descenso de las divisas vinculadas a las mismas aunque el repunte del USD/CAD ha sido discreto teniendo en cuenta la caída de los precios del petróleo. El par de divisas se está negociando a la baja y se mantiene por debajo del EMA de 200 días.
Anoche comenzaba la reunión sobre política monetaria de dos días de duración del Banco de Japón y se espera que publique su anuncio sobre la misma esta tarde. Como acaban de recortar en enero sus tipos de interés hasta niveles negativos, no se espera que el Banco de Japón tome medida alguna hasta más adelante. Aunque muchos bancos centrales han recurrido a tipos de interés negativos, el Banco de Japón está experimentando una reacción violenta debido al enfado y la frustración que ha causado al público en general. Según Wall Street Journal, “Kuroda ha sido convocado a comparecer ante el Parlamento en este momento del año más veces que cualquier otro dirigente de banco central en el mismo periodo desde 2002”. El miedo de que el Banco de Japón pudiera recortar los tipos más aún ha hecho que “muchas personas mayores compren cajas fuertes para atesorar efectivo debido a los temores de que los bancos comerciales puedan gravar sus depósitos”. De modo que, aunque Japón necesita otra ronda de medidas de estímulo, lo antes que podrá darse una relajación de su política monetaria es julio.
El euro y la libra han descendido a pesar del saludable incremento de la producción industrial de la zona euro. Tras subir bruscamente tras el anuncio del jueves del BCE, el EUR/USD se ha dejado la friolera de 180 pips, ligeramente menos de lo que descendió tras el recorte de los tipos de diciembre, después de lo cual repuntó considerablemente. El 1,1050, que fuera antes nivel de resistencia y ahora lo es de soporte, se encuentra justo por debajo de los niveles actuales. Si el descenso del EUR/USD fuera a detenerse, ése sería el nivel ideal. La zona euro no publicará más informes económicos relevantes esta semana, de modo que el rumbo del euro debería venir determinado por la demanda de dólares en el mercado. El Reino Unido no ha publicado informes económicos de relevancia, pero la libra será centro de todas las miradas desde el miércoles pues la nación divulgará sus datos sobre el mercado laboral.