Las acciones de Estados Unidos cerraron con una leve caída el jueves, aunque a un ritmo más suave que en el inicio de las operaciones, mientras inversores digerían un flujo abundante de información y maniobras por parte de bancos centrales mundiales.
Cifras mostraron que el ritmo de crecimiento del sector servicios en Estados Unidos en junio fue el más lento desde enero del 2010, de la mano con una disminución en nuevos pedidos.
Otros datos indicaron que los empleadores privados de Estados Unidos incorporaron 176.000 trabajos en junio, por encima de las expectativas de economistas; mientras que el número de estadounidenses que solicitó subsidio por desempleo la semana pasada tuvo su baja máxima en dos meses.
El promedio industrial de Dow Jones bajaba 29,97 puntos, o un 0,23 por ciento, a 12.914,87 puntos. El índice Standard & Poor’s 500 caía 4,71 puntos, o un 0,34 por ciento, a 1.369,31, mientras que el Nasdaq Composite avanzaba levemente 2,05 puntos, o un 0,07 por ciento, a 2.978,11.
El banco central de China redujo sus tasas de interés por segunda vez en dos meses el jueves, en el más reciente intento de la entidad por impulsar el crecimiento en la segunda economía más grande del mundo. La tasa referencial de préstamos se reducirá en 31 puntos base a un 6 por ciento y la de depósito bajará en 25 puntos base a un 3 por ciento.
La reacción de los mercados a un mayor estímulo monetario del Banco Central Europeo y del Banco de Inglaterra (BoE por su sigla en inglés) fue tímida.
Tal como se esperaba, el BCE redujo su principal tasa de interés a un mínimo récord de 0,75 por ciento y su tasa de depósito a cero, mientras que el BoE lanzó una tercera ronda de estímulo monetario que se materializará con la compra de 50.000 millones de libras en activos.
El dato de ventas de las principales empresas minoristas del país también ponía una cuota de decepción entre los inversores, ya que la incertidumbre sobre el empleo y el crecimiento mantuvo a los consumidores cautelosos en junio.