El precio continúa moviéndose con sentido lateral sin poder consolidarse por encima de 1,3850, ni por debajo de 1,3750.
La tendencia a largo plazo se mantiene alcista, aunque en el corto sigue predominando el momento bajista.
Una caída debajo de 1,3750 abrirá las puertas para descenso hacia 1,3700; aunque no se esperan grandes niveles de volatilidad para las próximas horas.
Un regreso del precio por encima de 1,3880 pondría fin a la perspectiva de corto plazo a favor del dólar; aunque de consolidarse por encima de 1,3850 (por donde además está cruzando una media móvil relevante) ya daría soporte al euro.
El cruce no pudo regresar por encima de la línea de tendencia alcista que quebró la pasada semana.