El coste de una potencial salida de Grecia de la zona euro sigue ocupando titulares, ya que muchos inversores cifran las posibilidades que esto ocurra en un 50%. Otro motivo de preocupación en Europa es la nacionalización de Bankia, un banco español con importantes pérdidas provocadas por su exposición al sector inmobiliario. Los tipos de los bonos españoles a 10 años volvieron a escalar por encima del 6% ayer y se situaron en un 6,078%, puesto que el diferencial de las permutas de incumplimiento crediticio (credit default swap o CDS) alcanzó un máximo. Por otro lado, el Banco Central Europeo se vio obligado a actuar, a causa del cese de adquisiciones de deuda europea por parte del fondo soberano de inversión China Investment Corporation, que hasta ahora había contribuido a que los tipos de los títulos de deuda no se dispararan. De este modo, el índice IBEX español perdió un 2,77% y el MIB italiano un 1,18%. La excepción la marcó el DAX alemán, que ganó un 0,47%. El EURUSD sigue a la baja y cotiza por debajo de su mínimo del lunes pasado (1,2939).
Las acciones asiáticas muestran resultados dispares esta mañana, ya que algunos anuncios de beneficios empresariales y resultados de empleo han contrarrestado los temores en torno a la posible salida de Grecia de la zona euro. La tasa de paro de Australia ha caído a su mínimo en un año (4,90%), mientras que los beneficios de Toyota indican que el fabricante de coches japonés vuelve al buen camino. Estos datos han provocado la subida del índice ASX australiano y del Nikkei japonés, que han ganado un 0,30% y un 0,22% respectivamente. Sin embargo, a pesar de las buenas noticias, los índices no siguen una tendencia fija y los que están expuestos a Europa probablemente se vean afectados a la baja. Así, el Hang Seng de Hong Kong ha perdido un 0,14% esta mañana. El AUDUSD ha rebotado después de cotizar a la baja durante varios días y ha ganado un 0,30% hasta 1,0081. El yen sigue en caída, por lo que USDJPY ha subido un 0,04% hasta 79,670.
Las acciones de los EEUU cerraron a la baja por 6a sesión consecutiva, lo que representa su peor racha desde agosto de 2011. Mientras tanto, los analistas bursátiles elevan sus pronósticos que tendrá lugar una nueva ronda de medidas de alivio cuantitativo, a la vez que han revisado su previsión del PIB a la baja de un 2% a un 1,90%. El consumo sigue empujando a la economía al alza frente a la caída del empleo, ya que la prolongación del horario de trabajo implica un mayor salario. Los índices bursátiles cotizaron a la baja en general, liderados por el Dow Jones, que perdió un 0,75%. El S&P 500 cayó un 0,67% y el Nasdaq un 0,39%. Por otro lado, los combustibles cotizan a la baja, de modo que el gas natural perdió un 0,73% y el petróleo cayó a causa del incremento de las reservas. El oro sigue por debajo de 1600$ y la plata también ha caído por debajo de un nivel importante, en este caso 30$.