La próxima semana daremos el pistoletazo a un nuevo mes, en este caso el mes de abril. Tal y como me habéis solicitado algunos lectores antes del inicio del próximo mes vamos a hacer un repaso detallado al comportamiento promedio que experimenta el mercado durante este próximo mes. Antes de nada, comentar que abril es históricamente uno de los mejores meses del año para las bolsas de valores.
La siguiente tabla nos muestra el comportamiento medio del S&P 500 cada mes del año desde 1950 hasta la actualidad.
La línea morada muestra el porcentaje de meses que el S&P 500 cerró positivo y las barras representan el rendimiento medio experimentado por el mercado en ese mes.
Tres meses destacan sobre el resto: abril, noviembre y diciembre.
El S& P500 ha cerrado en positivo el 72,73% de los meses de diciembre desde el año 1950, siendo por tanto el mejor mes del año para el mercado. Le sigue noviembre que es capaz de cerrar en positivo casi el 70% de las muestras. En tercer lugar aparece el mes de abril, con un balance positivo en el 68,18% de las muestras.
Remontándonos hasta el año 1950 el S&P 500 tiende a mostrar una gran fortaleza durante casi todo el mes.
El único momento de flaqueza del S&P 500 durante el mes de abril suele darse en su penúltima semana, no obstante el balance del mes tiende a ser muy positivo con alzas promedio del 1,42% lo que lo sitúa tal como tercer mejor mes del año para el mercado como vimos al inicio del artículo (solo por detrás de noviembre y diciembre).
Estos cuatro últimos años el mercado estadounidense ha cerrado con alzas sus meses de abril. Dentro del actual ciclo alcista iniciado en el año 2009, el único mes de abril que no terminó con balance positivo fue el de 2012 (-0,75%). Los seis años anteriores el mes de marzo resultó positivo para el índice norteamericano. De hecho el mes de abril del año 2009 fue el mejor mes de abril de la historia de los mercados acumulando alzas del 9,97% en los inicios del actual ciclo alcista.
El peor mes de abril tuvo lugar en 1970 cuando el S&P 500 se dejó un 9,05% en la recta final del mercado bajista registrado entre los años 1968 y 1970. En aquellos años las bolsas se vieron afectadas por una época en la que a la elevada inflación y a la debilidad económica se sumó una atmósfera de tensión ciudadana por la creciente participación de Estados Unidos en la guerra de Vietnam.
Como siempre os digo, los patrones estacionales están ahí para ofrecer una visión orientadora (que no operativa) de los mercados. Estos datos están bien para conocer cómo ha reaccionado el mercado ante situaciones similares, pero a la hora de operar lo importante siempre serán los aspectos técnicos que muestren tanto los mercados, como los sectores y los valores.