Tesla Inc. (NASDAQ:TSLA) sigue teniendo en vilo a los inversores, tras el aluvión de malas noticias que golpeó sus acciones la semana pasada. Las acciones se dejaron un 7,6% el viernes después de que Elon Musk hablara de un control de gastos extremo de la empresa y después de que un informe de la Junta Nacional de Seguridad de Transporte planteara interrogantes acerca de la seguridad de su sistema de piloto automático de asistencia al conductor.
En un correo electrónico enviado a su personal a escala global, Musk dijo que él y el nuevo director financiero, Zachary Kirkhorn, revisarán "literalmente cada pago" que sale de las arcas de la empresa para confirmar que los gastos son esenciales, según Bloomberg News.
Tesla lleva enfrentándose a una crisis de flujo de efectivo desde la demanda a su sedán Model 3 del primer trimestre. La empresa automotriz anunció una disminución del 31% en las entregas del vehículo en el 1T y dilapidó casi 1.000 millones de dólares en flujo de caja libre.
Otro revés que ha hecho descender las acciones de la empresa hasta mínimos de dos años y medio este viernes ha sido el informe del regulador de seguridad que decía que el sistema de piloto automático de asistencia al conductor de Tesla estuvo involucrado en el accidente fatal ocurrido en marzo. El último accidente tuvo lugar en Delray Beach, Florida, y en él participó un Model 3 —el tercer accidente del estilo en Estados Unidos.
Ésta es una mala noticia para los planes de crecimiento futuro de Tesla y probablemente someterá a sus acciones a una gran presión. Musk anunció el mes pasado que Tesla tendrá en circulación 1 millón de robotaxis de aquí a 2020.