El ecosistema criptográfico es bullicioso. Entre la jerga, las diferentes monedas, tokens, protocolos, contratos inteligentes, etc., etc., es fácil entender que la gente se pierda o que incluso pierda el interés. Y, si alguna vez se ha aventurado en el espectáculo de terror que es Cripto Twitter (NYSE:TWTR), sabe de lo que estoy hablando.
Por eso quiero ofrecer un nuevo marco para pensar en el ecosistema de los criptoactivos. Dejemos a un lado toda la terminología y pensemos en esto desde una perspectiva macroeconómica.
El mercado de las criptomonedas se reduce a una serie de redes. Como probablemente me hayan oído decir antes, estas redes están en realidad más cerca de los estados-nación digitales que de la tecnología tradicional. ¿Por qué? Es sencillo: las redes generan valor intrínseco y extrínseco. Piense en el Bitcoin o el Ethereum: ¿qué hay en el centro de estos ecosistemas? El dinero y el valor.
Quiero que piensen en los Bitcoin y los Ethereum del mundo no como activos, sino como economías. Una vez que lo haga, todo estará más claro, y el espacio será mucho más fácil de navegar.
Empecemos.
La economía Bitcoin se basa en una narrativa básica: los Gobiernos han destruido el valor de nuestras monedas y el Bitcoin es el dinero duro e independiente que finalmente nos liberará a todos. Protege ferozmente la integridad de su protocolo (cómo funciona su sociedad) y, como resultado, rehúye la innovación en nombre de la pureza. Piense en la economía Bitcoin como la iglesia católica en la Edad Media o la comunidad de los adeptos del oro. Sólo puede haber un Dios o un activo. En el caso de la economía Bitcoin, el único activo que existe es el Bitcoin. Por lo tanto, si desea asignar capital a esta economía, su única opción es RETENER Bitcoin.
Ahora, echemos un vistazo a la economía Ethereum. Al final de este artículo, entenderá por qué es probable que la de Ethereum sea mucho más grande que la economía Bitcoin a largo plazo.
La economía Ethereum es en muchos aspectos similar a la economía estadounidense. En este sistema, se puede empezar comprando Ethereum, que tiene una oferta deflacionaria, lo que significa que habrá menos a medida que pase el tiempo. Debido a esto, su "banco central" se adhiere a una política monetaria responsable diseñada para asegurar que el valor se mantiene y no se degrada.
Esto por sí solo es una buena razón para poseer Ethereum, pero hay más...
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Se puede obtener rendimiento. Del mismo modo que se puede comprar un bono del Tesoro de Estados Unidos y recibir a cambio una rentabilidad "sin riesgo", también se puede hacer lo mismo en la economía Ethereum. En este momento, puede obtener un 5% de rendimiento real del "banco central". Apostar Ethereum para conseguirlo da como resultado la solidez del Ethereum (oferta deflacionaria) más el aumento del rendimiento.
Ahora, puede que esté pensando para sí mismo, ok, eso es bastante atractivo, pero tal vez eres más como yo y no estás realmente interesado en apostar. Bueno, en ese caso, al igual que en los mercados tradicionales, puede intentar obtener un mayor rendimiento yendo más lejos en la curva de riesgo. ¿Dónde se puede hacer esto? En los préstamos del sector privado: DeFi.
En resumen: tenemos una moneda sólida, un mercado de deuda pública y un mercado de deuda corporativa o sector bancario.
Todo está cada vez más claro, ¿verdad? Sigamos...
Tal vez simplemente no le importa el rendimiento y en vez de eso está interesado en ganancias de capital. La economía Ethereum aquí también funciona de forma muy parecida a la economía de Estados Unidos.
Permítanme explicarme...
Allá por 2012, tras examinar el futuro de las economías mundiales, llegué a la conclusión de que Estados Unidos era el que tenía más probabilidades de generar las mejores oportunidades. Así que cogí todos mis ahorros y la facturación GMI en euros y los puse en dólares, a unos 1,48 dólares.
También quería obtener mayores rendimientos de mi posicionamiento en dólares a largo plazo y protegerme contra la inflación, así que decidí comprar propiedades en Miami y Caimán.
Desde entonces, el dólar ha subido un 26,5%. Mis propiedades han subido digamos un 40% (no tengo ni idea, pero sólo por dar números). En total, mi posición en dólares ha generado un rendimiento del 66,5%. Bastante bien.
También podría haber invertido en el mercado del arte, que históricamente ha obtenido mejores resultados que el inmobiliario, y habría sido una buena jugada en mi posición en dólares, ya que el mercado mundial del arte cotiza en dólares. Si hubiera querido asumir más riesgo, también podría haber invertido en acciones.
La razón por la que cuento esto es porque, en la economía Ethereum, se puede hacer lo mismo. Por ejemplo, la propiedad/el arte existe en forma de NFT. Tienen un precio en Ethereum y con el tiempo, cuando el valor del Ethereum vaya aumentando, los NFT (suponiendo que se haga bien, como ocurre con cualquier inversión) subirán no sólo a la vez que la moneda, sino que podrían superarla debido a su escasez o utilidad.
Por eso suelo decir que considero mis NFT opciones de compra sobre mi posición en el Ethereum.
Pero la cosa no acaba ahí. La economía Ethereum está creciendo. Una vez que se posee la moneda, se abre todo un nuevo mundo de oportunidades. Conozca la capa de pseudoequidad, aquí encontrará cosas como dApps, DAO, tokens sociales y Layer 2s que aprovecharán aún más la economía Ethereum. En mi opinión, a muchos de ellos les irá muy bien a largo plazo y superarán al Ethereum, al igual que Microsoft (NASDAQ:MSFT) ha superado al dólar. Ahora bien, eso no quiere decir que a TODOS ellos les vaya a ir bien, al igual que a muchas acciones no les ha ido bien.
Como ocurre con cualquier inversión, ya sea en la criptoeconomía o en las reales, hay que esforzarse para encontrar las mejores oportunidades. Naturalmente, si se acierta, los beneficios pueden ser enormes. Por el contrario, si uno se equivoca y no diversifica lo suficiente, puede perderlo todo. Es una economía de libre mercado brutal.
Aún es pronto para la economía Ethereum, y por eso ofrece tantas oportunidades increíbles. Es la economía de más rápido crecimiento del planeta, y viene con un banco central sólido en un mercado completamente libre donde el capital se asigna y utiliza rápidamente (¡y se destruye rápidamente también!).
A diferencia de la economía Bitcoin, la economía Ethereum es amplia y profunda y es prácticamente un espejo de las economías tradicionales. Con la ventaja añadida de que se ha reinventado para el futuro.
Otros protocolos pueden considerarse mercados emergentes o simplemente economías más pequeñas.
Por ejemplo, piense en el XRP como en Reino Unido: una economía antigua que, aunque importante y bien establecida, no crece muy rápido debido a la falta de innovación.
El Solana, por otro lado, podría ser Corea del Sur justo después de la crisis asiática, cuando su moneda y su mercado de valores se vinieron abajo. Fue una oportunidad inigualable que superó tanto al dólar como al S&P 500 durante seis años. Sin embargo, no ha resistido la prueba del tiempo. No logró mantener ese rendimiento superior. Quién sabe cómo resultará el Solana.
Aparecerán muchos nuevos participantes para hacerse un hueco en el nuevo mundo de las criptomonedas y, al igual que en el mundo real, algunos prosperarán, mientras que otros no serán más que un destello en la sartén.
Espero que este nuevo marco le ayude a entender y gestionar mejor lo que sigo creyendo que es una oportunidad única en la vida.
Si se toma el tiempo necesario para trabajar en ello, la recompensa puede cambiarle la vida.
Les dejo con este gráfico de la capitalización de mercado total de las criptomonedas: una configuración perfecta.
Como siempre, ¡buena suerte!