La Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA) es una prestigiosa institución con 160 años de antigüedad. Desde el año 2002, ha participado en la financiación de 12.700 pymes por 3.700 millones de dólares, mediante diferentes instrumentos de probada conveniencia para las partes.
Su Departamento Pymes va por más con el reciente lanzamiento de la “Incubadora de Negocios de la BCBA”, con el fin de brindar asistencia técnica y financiamiento a emprendedores, micro y pequeñas empresas.
En su lanzamiento, que tuvo lugar el pasado 30 de junio, el Jefe de Departamento Pymes, Carlos Lerner, se aseguró de dejar en claro que está todo por hacer y que, por tal motivo, realizarán sobre la marcha los ajustes que consideren necesarios sin someterse a rigideces autoimpuestas que limiten el desarrollo de la incubadora.
Los sectores objetivo identificados son los siguientes: base tecnológica, alimentación, salud, industria (metalmecánica, química y electrónica) y economías creativas. Pero también y a modo abarcativo, todo sector que aporte proyectos sobresalientes será tenido en cuenta.
No obstante, ante la pregunta de un participante proveniente de las TICs (Tecnologías de la Información y las Comunicaciones) se le hizo saber que no es una rama priorizada por la incubadora dado su carácter de intangible; en ese sentido, dichas opciones las ofrece el Mincyt (Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva).
Respecto a la elegibilidad de proyectos con alto grado de innovación, solo serán destinatarios del financiamiento aquellos que puedan demostrar un determinado track record. Estos antecedentes comprobables se refieren a la disponibilidad de un producto objetivo concluido o prototipado (listo para producirse en serie) y que sea escalable en términos del negocio propuesto.
Será importante demostrar conocimiento del entorno en el cual el proyecto actuará y una registración tributaria acorde. Sin ser excluyente, suma haber recibido apoyo estatal (nacional, provincial o municipal) ya que así se demuestra algún nivel de validación previa.
El financiamiento se instrumentaría (sí, potencial a la fecha) a través de tres formas posibles y con el respaldo de la figura de Sociedad de Garantía Recíproca, cuando corresponda:
INSTRUMENTO FINANCIERO TIPO PLAZO
Cheque de Pago Diferido Avalado Individual Hasta 1 año
Pagaré Individual Superior 1 año y hasta 5
Fideicomiso Financiero Vs Empresas / Proyectos No establecido
El sistema de descuento de “Cheques de Pago Diferido” en el mercado de capitales permite a quien tiene cheques a cobrar en un futuro (por un plazo máximo de 360 días), adelantar su cobro vendiéndolos en la Bolsa; y a quien posee fondos líquidos, comprar estos cheques a cambio de tasas de interés futuras.
Lo mismo ocurre con el título de crédito “Pagaré”, que cumpliendo determinadas formalidades, constituye la promesa pura y simple de la parte suscriptora, de que pagará a la otra llamada beneficiaria o tenedora, una suma de dinero en un plazo de tiempo preestablecido.
El Fideicomiso Financiero permite obtener fondos, separando determinados activos (reales o financieros) del patrimonio de la/s empresa/s y cediéndolos a un administrador en propiedad fiduciaria. El administrador interviene para que los activos cedidos sean transformados en activos financieros líquidos y se puedan negociar en el mercado bursátil.
La convocatoria está abierta hasta el 31 de agosto y se inicia enviando por mail un detalle del proyecto para que el Comité Sectorial afín a la actividad económica de dicho proyecto, lo evalúe y establezca la herramienta de financiamiento acorde. Los diferentes Comités son integrados por universidades públicas y privadas, referentes de empresas líderes y representantes del Foro de Ciencia y Tecnología
En cuanto a la conveniencia por acudir a estos instrumentos de financiamiento, el Jefe de Departamento Pymes Carlos Lerner se mostró confiado al manifestar: “…aceptamos la competencia de cualquiera, cuando (la empresa) vuelve lo recibimos con el mismo amor…”.
Puedo agregar con una mirada más objetiva, que es una alternativa para quien planea acudir a un Venture Capital evitándose tener que incorporar socios a la estructura pero sabiendo que está formalizando un pasivo en el Mercado de Capitales. Por esto, el modelo de negocio tiene que tener suficiente madurez para que el flujo de fondos cubra los compromisos asumidos.
Si bien resulta positivo sumar actores al ecosistema emprendedor local, queda planteado el desafío de integrar correctamente a los distintos actores de los comités sectoriales, de forma tal de lograr conferirle dinamismo al proceso de evaluación, evitando el desgaste y frustración del solicitante, con el correspondiente costo de oportunidad implícito.
Tampoco hay que perder de vista que el emprendedorismo tiene una identidad propia y será el desafío de la “Incubadora de Negocios de la BCBA” alinear esos intereses con los del Mercado de Capitales.