El Banco de Inglaterra acaba de dejar sin cambios los tipos de interés de referencia en el 0,25%, luego del recorte de los mismos que dispuso en agosto, consecuencia directa del Brexit.
Asimismo, el plan de compra de bonos de la entidad también se mantuvo sin cambios, y con una perspectiva de que el mismo pueda ser incrementado en cualquier momento.
La libra esterlina reaccionó sin muchos cambios a los anuncios. Luego de una tímida baja a 1,3205, crece en estos momentos a 1,3240, pero manteniendo una nueva y flamante tendencia bajista en el gráfico de 4 horas, luego del quiebre de una línea alcista que se produjo el martes por la tarde. Con un pullbak ya cumplido en el máximo de la víspera, 1,3270, la libra podría caer nuevamente en la sesión americana, con soportes en 1,32, 1,3170 y 1,3130.
En tanto, el euro no sale de un contexto lateral en su cruce con el dólar, y pese a que los últimos mínimos ascendentes sugieren un crecimiento del mismo para las próximas horas, solo la superación de 1,1265/70 podría disparar a la moneda única a la zona de 1,33, fuerte resistencia de difícil superación.
El yen, por su parte, se mueve en un estrecho rango de precios, a la espera de los anuncios de política monetaria por parte del Banco de Japón, que tendrán lugar la semana próxima, casi en simultáneo con los de la Fed.
La sesión americana del jueves asoma como muy atractiva, plena de informes que le darán ritmo al mercado. A las 8:30 del este se conocerá una batería de datos, encabezados por las peticiones semanales de subsidio por desempleos y las ventas minoristas, cifra importante de cara a la interpretación que de la misma pueda tener la Fed la semana próxima. En simultáneo, se conocerá el índice de precios mayorista, aunque este quedará algo eclipsado por los informes antes mencionados.
En resumen, una sesión interesante, en medio de una puja importante en los índices bursátiles de Nueva York, que tratan de no alejarse mucho de sus máximos históricos que alcanzaron días atrás, con el petróleo nuevamente en el centro de atención de los mercados, y con la expectativa creciente acerca de lo que pueda pasar la semana próxima con la tasa de interés de la Fed. Al cabo, el único motivo por el cual los mercados reaccionan en forma concluyente.