El S&P 500 cerró la jornada de ayer con un descenso de 30 puntos básicos a pesar de haber subido más de un 1% a la apertura. El mercado cae después de que los datos de la encuesta JOLTS, más al rojo vivo de lo esperado, mostraran 10,7 millones vacantes de puestos de trabajo frente a la previsión de 9,7 millones. Los datos han impulsado además los tipos y el dólar. La Fed se refiere mucho a los datos de la encuesta JOLTS, sobre todo en lo que respecta al número de vacantes de empleo en relación con el número de desempleados.
Esa relación ha vuelto a subir a 1,9, lo cual va en dirección opuesta a lo deseando por la Fed. Antes de la pandemia, ese valor ascendía a apenas un 1,25%. Basándose en la relación entre JOLTS y el número de parados, el progreso ha sido muy escaso, por no decir nulo.
Mientras tanto, según las últimas estimaciones de la Fed de Cleveland, se espera que el IPC suba en octubre un 8,1% y el IPC subyacente un 6,5%. No mejorará en noviembre, con un aumento del IPC del 8% y del 6,6% en su versión subyacente. Por lo tanto, se está avanzando muy poco en materia de inflación.
A pesar de los escasos avances en materia de inflación y empleo, el mercado de valores cree que la Reserva Federal mostrará sus cartas y anunciará al mercado que va a ralentizar las subidas de tipos para que las acciones puedan subir y las condiciones financieras puedan relajarse. A mí me parece poco probable. Los futuros de los fondos de la Fed parecen esperar que el tipo terminal suba a partir de ahora. Ayer, los futuros observaron el tipo de interés a un día por encima del 5% hasta julio de 2023, por encima de donde se situaran el 20 de octubre, el día antes de la publicación del artículo del Wall Street Journal.
S&P 500
Las acciones hicieron un amago de dispararse ayer, pero no lo consiguieron, cosa que a mí me parece negativa. Además, el S&P 500 ha revertido el 61,8% de la caída que comenzó el pasado 12 de septiembre. Por lo tanto, si el índice dejara de subir aquí, no me sorprendería. El índice trató de salir de esa bandera alcista ayer y fracasó, y las tendencias a largo plazo han sido bajistas todo este tiempo. Si los tipos van a subir y el dólar se fortalece demasiado, eso no sería bueno para las acciones.
AMD
No sé por qué Advanced Micro Devices (NASDAQ:AMD) no descendió más ayer. La compañía ofreció una orientación decepcionante. La orientación del margen bruto fue un fracaso; la orientación de los ingresos quedó bien lejos del punto medio del rango. Se ha formado una clara bandera bajista en el gráfico, y si cae por debajo de la tendencia alcista, probablemente a las acciones les quede un largo camino por recorrer.
Qualcomm (NASDAQ:QCOM)
Ha pasado mucho tiempo, pero Qualcomm nunca llenó la brecha de 92 dólares del verano de 2020. Quizá tenga pronto esa oportunidad. El RSI de Qualcomm es muy bajista, con esa larga y pronunciada tendencia bajista. No se ve bien, en mi opinión, hacia dónde se dirige ésta.