Chile cuenta con herramientas fiscales y margen en política monetaria para enfrentar una esperada desaceleración de la actividad doméstica en el segundo semestre, dijo el jueves el ministro de Hacienda, Felipe Larraín.
Luego de que la economía chilena creció cerca de un 5,5 por ciento en la primera mitad del año, tanto el Gobierno como el Banco Central han mostrado señales de cautela sobre el desempeño de la actividad en lo que resta del 2012, debido al complejo escenario externo.
“Chile tiene espacio tanto en política monetaria como política fiscal, eso es algo que en caso de ser necesario (…)tenemos un plan de contingencia preparado”, dijo Larraín a periodistas tras un foro empresarial.