El banco central de China tomó medidas el martes para garantizar a los mercados que proveerá efectivo a las instituciones financieras que lo requieran, después de días de turbulencias que hicieron caer a las acciones a su menor nivel en más de cuatro años ante los temores a una crisis de crédito bancario.
La entidad anunció que había provisto liquidez a algunas instituciones que afrontan problemas temporales de escasez de efectivo y que continuaría haciéndolo si era necesario.
El Banco Popular de China (PBOC, por sus siglas en inglés) desea restringir los fondos que están llegando al vasto mercado de crédito informal del país y enviar ese dinero a áreas más productivas de la economía, a fin de alentar el crecimiento.
Sin embargo, su decisión de permitir que las condiciones de préstamo se endurezcan, que llevó las tasas de interés de corto plazo a niveles extraordinarios en algunas transacciones, ha generado temores de que se produzca una crisis crediticia perdurable, lo cual podría impactar en los mercados a nivel global.
En una declaración publicada tarde en el día que buscaba reafirmar su determinación de lograr que los bancos controlen los créditos, el PBOC dijo que proveería efectivo a las instituciones que respalden a la economía real.
“El banco central proveerá liquidez de apoyo a las instituciones financieras que afronten escasez temporal, pero que han estado concediendo crédito en cantidad y a un ritmo prudentes, en línea con la política del Gobierno y en favor de la economía real”, sostuvo.
“El banco central también tomará las medidas necesarias para ayudar a aquellas instituciones que presentan problemas en la administración de liquidez con el objetivo de mantener la estabilidad general en el mercado de dinero”, indicó.
MERCADOS SUSCEPTIBLES A CRÉDITO
Previamente en el día, las acciones chinas tocaron su menor nivel desde el 2009, sumando pérdidas a varios días de retrocesos ante las preocupaciones iniciales por una confrontación entre el banco central chino y el mercado.
Pero el mercado bursátil recuperó buena parte del terreno perdido hacia el final de la jornada, en anticipación al reporte a los medios del banco central chino tras el término de la sesión.
“Actualmente, el riesgo de liquidez en el sistema bancario está bajo control”, dijo Ling Tao, vicegobernador de la sucursal de Shanghái del Banco Popular de China en una conferencia de prensa.
“Vamos a estabilizar las expectativas del mercado y guiar a las tasas de interés del mercado a niveles razonables”, agregó.
El índice CSI300 de las principales cotizaciones de Shanghái y Shenzhen cerró con una caída de sólo un 0,3 por ciento, tras haber bajado hasta un 6 por ciento durante el día, a su nivel más bajo desde enero del 2009. El mercado se desplomó un 6,3 por ciento el lunes.
Reportes de falta de efectivo en los cajeros de algunos bancos se sumaron al nerviosismo de un mercado agitado, con el índice de acciones financieras en la bolsa de Shanghái bajando un 7 por ciento antes de recuperarse para cerrar sólo con un retroceso de un 0,1 por ciento.
No estaba inmediatamente claro si los comentarios de Ling serían suficientes para mantener a los mercados en calma el miércoles, pero los operadores en el mercado de dinero recibieron con beneplácito el tono más complaciente.
“El PBOC pareció suavizar su posición un poco al decir que ajustará la liquidez de acuerdo con las condiciones del mercado”, dijo un operador de dinero en un banco comercial de China en Shanghái. “Parece que el pico de la contracción del mercado ha terminado”, añadió.
Las tasas en el mercado de dinero se dispararon la semana pasada después de que las autoridades permitieron un endurecimiento de las condiciones de crédito. Aunque las tasas a corto plazo han caído esta semana, los inventarios en los bancos se han desplomado ante la preocupación de que el reducido financiamiento afecte a las ganancias y a la economía.