Buenas noticias para las acciones de Tesla (NASDAQ:TSLA), al menos por ahora. La empresa tiene un flujo de caja positivo por primera vez y va a fabricar más automóviles.
Tras el repunte de casi el 40% de sus acciones desde los mínimos de octubre, los vendedores en corto se están reduciendo y los bajistas pierden fuerza en relación con este fabricante de vehículos eléctricos.
El mayor lastre para las acciones de Tesla ha sido la incertidumbre en torno a la producción del Model 3, que es la clave del éxito de los planes más ambiciosos de su presidente ejecutivo Elon Musk. El principal motor del repunte de Tesla desde su salida a bolsa en 2010 ha sido la promesa de la empresa de que puede fabricar un coche eléctrico asequible, el Model 3, para su comercialización en el mercado.
Creyendo en la visión de Musk, cientos de miles de personas se pusieron a la cola para comprar este coche. El problema fue que Tesla no consiguió fabricar suficiente cantidad. Pero hay indicios de que Tesla está a punto de salvar este gran obstáculo. Tesla va camino de superar las expectativas de fabricación de su Model 3 este trimestre, acercándose más al rango de 60.000 vehículos, si el ritmo de fabricación se mantiene en los niveles actuales, según previsiones de Bloomberg.
Lo más impresionante es que Tesla probablemente abra 2019 fabricando más de 7.000 coches en total por semana. Como Tesla planea seguir aumentando la producción, la perspectiva de hacer medio millón de coches eléctricos al año comienza a parecer posible. Si esta tendencia se mantiene, y esquiva cualquier contratiempo, Tesla no encontrará ninguna dificultad en el pago de su deuda de próximo vencimiento.
En el informe de resultados del tercer trimestre, Tesla anuncio un flujo de efectivo libre positivo de 881 millones de dólares, un importante logro en un momento en que Musk alimentaba la polémica entre su fallido intento de privatizar Tesla, lo que desencadenó una investigación de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), la acusación de pederasta contra uno de los buzos del rescate de la cueva tailandesa, o su aparición en un podcast fumando marihuana.
Sigue siendo una apuesta arriesgada
Para los inversores interesados en las acciones de Tesla, el mayor reto es creer que este cambio es sostenible y que el comportamiento errático de su director general ha terminado. En nuestra opinión, Tesla sigue siendo una apuesta arriesgada para los inversores serios y Musk sigue siendo la mayor amenaza para el valor de las acciones.
En cuanto sus acciones se recuperaron de su caída de octubre, Musk volvió a criticar a la SEC, diciendo el domingo en una entrevista para "60 minutos" que no respeta al organismo y que sus publicaciones en Twitter no han sido censuradas por la empresa. Incluso si aceptáramos el comportamiento de Musk como una anomalía con la que los inversores deben vivir, creemos que es demasiado pronto para hacer una apuesta a largo plazo en las acciones de la empresa.
En conclusión
Los analistas esperan que la empresa genere un flujo de caja libre de 360 millones de dólares en el cuarto trimestre y de 110 millones de dólares en los primeros tres meses de 2019. Para debilitar considerablemente el posicionamiento de los bajistas de Tesla, la empresa debería cumplir con las expectativas de los analistas de forma constante y Musk debería resistir el impulso de publicar tuits insensatos.
Creemos que los próximos dos trimestres son cruciales para Tesla a la hora de demostrar que los vendedores en corto están equivocados y que el cambio es sostenible. Hasta entonces, no estamos convencidos de que Tesla ofrezca una ecuación riesgo-recompensa que merezca la pena a un inversor serio.