El trading es una actividad que implica dificultad y riesgo económico y pasa por ser una de las profesiones más estresantes del mundo financiero. La presión constante por obtener resultados positivos, las decisiones rápidas y el manejo de grandes sumas de dinero pueden generar un estrés significativo en los traders. Este artículo, dividido en dos partes, explora en detalle el fenómeno del "estrés de rendimiento" en el trading, abordando su definición desde una perspectiva psicológica, su impacto en los traders y las estrategias efectivas para gestionarlo.
¿QUÉ ENTENDEMOS POR “ESTRÉS DE RENDIMIENTO” DESDE UN ENFOQUE PURAMENTE PSICOLÓGICO?
El "estrés de rendimiento" se refiere al estado de tensión y ansiedad que experimentan las personas cuando sienten que deben alcanzar ciertos estándares o expectativas en su desempeño. En el contexto del trading, este estrés puede ser particularmente agudo debido a la naturaleza del trabajo, donde cada decisión financiera tiene el potencial de resultar en ganancias o pérdidas significativas. Desde una perspectiva psicológica, el estrés de rendimiento está relacionado con varios factores cognitivos y emocionales.
Según el modelo transaccional del estrés de Lazarus y Folkman (1984), el estrés no es simplemente una respuesta a un estímulo externo, sino que depende de la percepción individual del evento y de su capacidad para afrontarlo. En el trading, la percepción de alta presión y las expectativas pueden llevar a una evaluación negativa de la situación, incrementando el nivel de estrés.
Estudios en el ámbito de la psicología del trabajo, como los de Blascovich y Mendes (2000), sugieren que el estrés de rendimiento está estrechamente vinculado a la autoeficacia y a la capacidad de manejar la presión. La autoeficacia, o la creencia en la propia capacidad para realizar tareas específicas, juega un papel crucial en cómo los traders enfrentan el estrés. Aquellos con alta autoeficacia tienden a ver los desafíos como oportunidades para crecer, mientras que aquellos con baja autoeficacia pueden sentirse abrumados por las demandas del trabajo.
El estrés de rendimiento también se relaciona con el miedo al fracaso y la autocrítica. Los traders que tienen una mentalidad fija, como describen Dweck (2006), pueden ser más propensos a experimentar estrés de rendimiento. Ven sus habilidades como inmutables y, por lo tanto, cualquier error o pérdida se percibe como una amenaza a su identidad profesional.
Además, en el contexto de las grandes gestoras de fondos, el entorno competitivo del trading y las expectativas externas, como las de los empleadores o los clientes, aumentan la presión. Los estudios de Van Yperen y Janssen (2002) destacan cómo las altas demandas de desempeño y la baja autonomía pueden resultar en altos niveles de estrés laboral. De esta manera, en las grandes gestoras de fondos, la necesidad constante de superar a los competidores y satisfacer a los clientes puede exacerbar estos efectos.
Recapitulando lo visto, el estrés de rendimiento en el trading es una experiencia multifacética que involucra la percepción de la presión, la autoeficacia, el miedo al fracaso y las expectativas externas. Estos factores, en conjunto, crean un entorno en el que el estrés puede convertirse en una constante diaria para muchos traders.
IMPACTO PSICOLÓGICO DEL ESTRÉS DE RENDIMIENTO
El impacto del estrés de rendimiento en los traders puede afectar tanto su salud mental como su desempeño profesional. Psicológicamente, el estrés crónico puede llevar a varios problemas, incluyendo ansiedad, depresión y agotamiento.
La ansiedad es una respuesta común al estrés de rendimiento. Los traders pueden experimentar síntomas de ansiedad anticipatoria, donde se preocupan constantemente por futuros resultados y su capacidad para manejar las demandas de su trabajo. Esta preocupación constante puede interferir con la concentración y la toma de decisiones, aspectos críticos en el trading. Según la Asociación Americana de Psicología (APA), la ansiedad puede manifestarse en síntomas físicos como palpitaciones, sudoración y temblores, lo que puede agravar aún más el desempeño de los traders.
La depresión es otro riesgo asociado con el estrés de rendimiento. La presión continua para rendir y el temor al fracaso pueden llevar a sentimientos de desesperanza y baja autoestima. Los estudios de Karasek y Theorell (1990) sobre el estrés laboral indican que los entornos de alta demanda y bajo control, como los que a menudo se encuentran en el trading, están correlacionados con mayores tasas de depresión. Para los traders, la depresión puede manifestarse en una falta de motivación, pérdida de interés en el trabajo y dificultades para encontrar placer en actividades que antes disfrutaban.
Además del impacto directo en la salud mental, el estrés de rendimiento puede afectar negativamente el comportamiento y la toma de decisiones de los traders. El estrés puede nublar el juicio, llevando a decisiones impulsivas y arriesgadas que no se basan en un análisis racional. Según un estudio de Lo et al. (2005), los traders bajo estrés son más propensos a cometer errores y tomar decisiones subóptimas, lo que puede resultar en pérdidas financieras significativas.
El estrés de rendimiento también puede afectar las relaciones personales de los traders. La presión constante y el tiempo dedicado al trabajo pueden llevar a conflictos con familiares y amigos, aislamiento social y una reducción en la calidad de vida general. La falta de apoyo social, como sugieren Cohen y Wills (1985), puede agravar los efectos negativos del estrés y dificultar aún más su manejo.
En conclusión, el estrés de rendimiento en el trading puede tener un impacto significativo en la salud mental y el bienestar general de los traders. La ansiedad, la depresión, el agotamiento y los problemas de toma de decisiones son algunos de los efectos más comunes. Reconocer estos impactos es el primer paso para desarrollar estrategias efectivas para manejar el estrés y mantener un desempeño saludable y sostenible en el trading. La semana que viene ahondaremos en el agotamiento profesional (“Burn out”) y veremos algunas técnicas efectivas para superar estas situaciones de estrés.