La confianza del consumidor de Estados Unidos disminuyó en marzo, mientras que los ciudadanos elevaron sus expectativas inflacionarias a su mayor nivel en 10 meses, aunque se estima que la recuperación económica todavía sigue en marcha.
Otro dato del martes mostró que los precios de las casas se mantuvieron sin variaciones en enero respecto a diciembre, la primera vez desde julio en que el índice desestacionalizado S&P/Case-Shiller no baja, una señal de que el golpeado mercado inmobiliario se está estabilizando lentamente.
Según un informe del grupo industrial The Conference Board, el índice mensual sobre la confianza del consumidor estadounidense se situó en marzo en 70,2 puntos, tras el dato revisado al alza de 71,6 puntos en febrero, cuyo dato original fue de 70,8 puntos.
Economistas esperaban una lectura de 70,3, según un sondeo de Reuters.
Los detalles del reporte fueron dispares, dado que las expectativas del consumidor cayeron, pero la evaluación sobre su situación actual aumentó a su mejor nivel desde septiembre del 2008. La mejora en la opinión de los consumidores sobre su situación actual sugiere que aún sienten que la economía no está perdiendo impulso, dijo el informe.
Pero las expectativas inflacionarias para el año saltaron a su nivel más alto desde mayo del 2011 en un 6,3 por ciento desde un 5,5 por ciento.
“La parte de mayor movilidad en ese escenario ha sido la de los precios de la gasolina. Porque ciertamente eso está en el radar de los consumidores”, dijo Carl J. Riccadonna, director y economista senior de estudio de mercados globales en Deutsche Bank Securities en Nueva York. El alza en los precios de la gasolina ha desatado preocupaciones de que los ya complicados consumidores puedan comenzar a sentirse tensionados, lo que pondría un freno a la economía.
El índice compuesto de S&P/Case Shiller sobre los precios de las casas en 20 áreas metropolitanas se mantuvo estable en enero en su medición desestacionalizada. Un sondeo de Reuters entre economistas había apuntado a una baja del 0,2 por ciento tras la caída el 0,5 por ciento vista en diciembre.
Esta es la primera vez en que el índice no cae desde julio del 2011, cuando los precios también permanecieron sin cambios en la comparación mensual. La última vez en que los precios subieron fue en abril del año pasado. El precio promedio de la vivienda en el país ha vuelto a los niveles de inicios del 2003, dijo el informe.
“Esperamos que los precios ahora se estabilicen, y quizás incluso suban un poco en los próximos meses al menos”, comentó Ian Shepherdson, economista jefe de High Frequency Economics. “Falta mucho para una recuperación sostenida en los precios de las casas, pero la estabilización es un primer paso esencial, ya que nadie quiere prestar dinero para comprar un activo que se deprecia”, agregó. Los precios han sido presionados por una baja demanda, ventas de casas en remate y una sobreoferta de ejecuciones hipotecarias pendientes. Sobre una base no desestacionalizada, los precios de las casas cayeron un 0,8 por ciento en enero frente a diciembre.
En la comparación interanual, los precios cayeron un 3,8 por ciento, en línea con lo esperado y tras una baja del 4,0 por ciento vista en diciembre.
Los mercados financieros tuvieron leves reacciones a los datos. Las acciones en Wall Street se estancaron un día después de que sus principales índices subieron a máximos de casi cuatro años.
Otro sondeo mostró que la confianza de la pequeña empresa estadounidense subió a su nivel más alto en un año en el primer trimestre, con más empresas que planean aumentar su contratación en la medida que mejoren las perspectivas de la economía. Vistage International dijo el martes que su índice de confianza subió a 105,1 en el primer trimestre desde 98,8 en los tres meses finales del 2011. Este fue el nivel más alto desde el primer trimestre del 2011.