En un contexto de quietud casi absoluta de los mercados, el índice de confianza del consumidor en Estados Unidos aparece como el informe que puede darle algo de movimiento a los pares principales de divisas.
El euro se estacionó en la zona de 1,0450, con un sesgo ligeramente alcista en el gráfico de 4 horas, y confirmaría una recuperación más importante a la superación de 1,0475, primera resistencia, a la que sigue 1,0505 y 1,0525. Sin embargo, una baja de 1,0425, podría llevar a la moneda única a sus próximos soportes, en 1,04 y 1,0365.
En tanto, la libra esterlina presenta una tendencia bajista más marcada, guiada por una línea en dicha dirección cuyo quiebre operará recién a la superación del no muy lejano 1,2275. La divisa británica ha perdido posiciones en los últimos días, tocando mínimos de más de dos meses, y por el momento no se observan cambios relevantes inminentes.
Por su parte, el yen se mueve en un rango de precios muy estrecho en estas horas, cotizando a 117,35. El quiebre de 116,90 podría darle algo de fuerza al yen, que sin embargo no encuentra motivos desde las noticias para recuperarse. La divisa nipona ha perdido prácticamente todo el terreno que había ganado durante los primeros meses del año, aunque logra terminar el mismo con una ligera ganancia respecto a la apertura en la zona de 121,67.
Esperamos una sesión americana con relativa tranquilidad, que recién encontrará movimientos de mediana intensidad con en informe antes mencionado.