Tras el escándalo al que se ha enfrentado estos últimos años Wells Fargo & Company (NYSE:WFC), que ha lastrado sus acciones y fomentado la volatilidad, tal vez la razón más convincente para adquirir acciones del banco multinacional estadounidense es su rentabilidad por dividendo del 3,23%, que es perceptiblemente más elevada que la que ofrecen sus homólogos.
Este dividendo ha proporcionado cobertura y compensación por una serie de escándalos relacionados con las prácticas de la entidad crediticia: en 2016, salieron a la luz "varios abusos al consumidor", provocando que la empresa tuviera que pagar 185 millones de dólares. Después, en febrero de este año, la Fed anunció que hasta que se llevaran a cabo las "suficientes mejoras", el banco tendría restringido su crecimiento más allá del total de sus activos de finales de 2017.
Pero ahora que el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años asciende a un 3,225 (en el momento de redactar estas líneas), los inversores de renta fija fiable pueden ver los bonos del Estado como una apuesta mucho más segura.
Wells Fargo ha bajado ya un 11,77% en lo que va de año. A medida que se acerca la presentación de resultados del 3T del viernes, y con el descenso de un 11,77% anual de las acciones, los inversores podrían preguntarse si éste es el momento de comprar —o incluso de vender— acciones de WFC. En nuestra opinión, los resultados tendrían que ser notablemente mejores de lo esperado para compensar la pérdida de confianza que los consumidores y los inversores han experimentado durante los últimos años.
Pero incluso aunque Wells Fargo superara las expectativas, los inversores harían bien en considerar otras empresas de dividendo similar o tal vez un activo de menos riesgo, es decir, los bonos del Tesoro a 10 años. Los bonos a 10 años rondan los 0,75 puntos básicos por debajo de la rentabilidad por dividendo de Wells Fargo. Con un retorno tan rentable, ¿por qué arriesgar capital en una empresa a la baja cuando se puede recibir un rendimiento equivalente sin prácticamente ningún riesgo?
El 10 de septiembre, el precio de las acciones del banco se situó por debajo de su línea de tendencia alcista de octubre de 2016, por segunda vez desde el 19 de marzo. El viernes, el precio cruzó por debajo del DMA 200, que ha trazado la línea de escote de la parte superior de un gráfico de cabeza y hombros. Una caída por debajo del nivel de 50 dólares activaría una orden de minimización de pérdidas e inclinaría la balanza del mercado hacia la sobreoferta.
Estrategias de Trading – configuración de la posición corta
Los traders conservadores esperarán al menos una penetración del 3% y/o tres días en los que el precio se mantenga por debajo de la línea de escote, preferiblemente incluyendo un viernes, lo que indicaría el compromiso de los traders con sus posiciones. Después podrían esperar un movimiento de retorno que confirme la resistencia, con al menos una vela larga roja envolviendo la vela roja anterior o una vela pequeña de cualquier color.
Los traders moderados podrían contentarse con una penetración de 2% y/o dos días en los que el precio se mantenga por debajo de la línea de escote, para evitar una trampa para bajistas. Después podrían esperar un movimiento de retorno, para una mejor opción de entrada, pero no necesariamente la confirmación de la nueva tendencia.
Los traders agresivos podrían posicionarse en corto tras una penetración del 1% y/o un día en el que el precio se mantenga por debajo de la línea de escote.