Justo cuando una tendencia en el creciente sector de la marihuana —en este caso el elevado ritmo de los acuerdos —empezaba a ser fácil de predecir, se produce un nuevo giro. Y éste es grande, por valor de 3.400 millones de dólares. Los observadores del sector, así como los inversores, estarán muy pendientes de esta alianza en particular por una serie de razones.
El productor canadiense de cannabis Canopy Growth (NYSE:CGC) (TO:WEED) ha firmado un acuerdo este mes para la adquisición del productor de marihuana de Estados Unidos Acreage Holdings (OTC:ACRGF). Éste es el primer acuerdo de este tipo entre dos productores de cannabis de ambos lados de la frontera. También podría sentar las bases de una superpotencia estadounidense de cannabis.
Desde el inicio del año 2019, las acciones de Canopy se han disparado, subiendo casi un 73% y convirtiéndose en las acciones de cannabis con una mayor capitalización de mercado. Las acciones cerraron el viernes en 49,10 dólares.
El actual acuerdo podría impulsar el valor de las acciones mucho más... en algún momento. Pero ahora mismo es más prudente ver este acuerdo como un compromiso de boda sin fecha fijada. No deberíamos abrir el champán hasta que el Gobierno Federal de Estados Unidos legalice la marihuana, ya que no será hasta entonces cuando podrá consumarse realmente esta unión.
Este plan de contingencia es necesario puesto que, según las regulaciones canadienses, las empresas que cotizan en la bolsa de valores de Toronto no pueden poseer activos en lugares donde la marihuana no sea legal. Y en Estados Unidos, esto se refiere a las leyes federales, a pesar de que ciertas leyes estatales ya hayan legalizado el cannabis.
Sin embargo, es interesante destacar que los observadores sólo hablan de “cuándo”, no de “si” el Gobierno de Estados Unidos reconocerá formalmente el movimiento estado por estado hacia la legalización de la marihuana.
Según los términos del acuerdo, Canopy Growth hará un pago inicial 300.000 millones de dólares en cuanto los accionistas de Acreage Holding aprueben el acuerdo. Entonces, Canopy Growth seguirá adelante con la adquisición, los accionistas de Acreage recibirán algo más de la mitad del valor de una acción de Canopy —0,5818 dólares para ser exactos— por cada acción de Acreage que tengan.
El presidente y director ejecutivo de Canopy Growth, Bruce Linton, ha resumido la importancia de este acuerdo:
"Nuestro derecho a adquirir Acreage asegura nuestra estrategia de entrada en Estados Unidos en cuanto el Gobierno Federal lo permita”.
Conseguir la entrada al mayor mercado de marihuana del mundo es un paso colosal para Canopy. Otras empresas de cannabis que buscan hacerse un hueco en Estados Unidos hasta ahora sólo han tratado de asociarse con empresas que operan en los estados que ya han legalizado el producto. Canopy podrá aprovechar su operación de expansión no sólo para crecer en el entorno de la marihuana, sino para la investigación y desarrollo del cannabis medicinal y de productos comestibles y aceites.
"Cuando se pueda ejercer este derecho, el acceso a los grandes recursos de Canopy Growth nos permitirá innovar, desarrollar y distribuir marcas de cannabis de calidad en Estados Unidos y continuar expandiendo nuestra presencia allí", explica Linton. "Al mismo tiempo, hay una serie de factores que dificulta aún más que los operadores con presencia en varios estados alcancen su pleno potencial, incluyendo la enorme cantidad de dinero necesaria para expandirse".
Con el acuerdo de Acreage, Canopy estará activo en 20 estados, un mercado que se ha valorado en más de 17.000 millones de dólares.
La conexión de Acreage con otras grandes empresas canadienses
El plan de Canopy Growth de adquirir la neoyorquina Acreage Holding no es la única conexión canadiense de la compañía estadounidense. Entre los altos cargos de su junta o miembros directivos encontramos al exprimer ministro canadiense, Brian Mulroney. Muchos han interpretado el puesto de Mulroney en la junta de Acreage —que también incluye al expresidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, John Boehner— como una señal de que la legalización en Estados Unidos es una medida rentable.
Los inversores que hayan estado atentos, sin embargo, sabrán que este último acuerdo, aunque grande, no es el más grande de Canopy Growth. En noviembre pasado, firmó un acuerdo de 4.000 millones de dólares con Constellation Brands (NYSE:STZ), productor internacional de vino y cerveza de Estados Unidos responsable de marcas icónicas como Corona y Robert Mondavi. Este acuerdo dio a Constellation una participación del 37% en la empresa, ubicada en Smith Fall, Ontario.
Y los acuerdos seguirán acumulándose. Sólo en marzo, Canopy anunció tres acuerdos estratégicos: la adquisición del productor de cáñamo estadounidense AgriNextUSA, un acuerdo plurianual con la empresa HollWeed North Cannabis, con base en la Columbia Británica, y una ampliación de su alianza con OG DNA Genetics.
El acuerdo de AgriNextUSA se alcanzó inmediatamente después de la aprobación de la ley agrícola de Estados Unidos que legalizaba el cáñamo. El acuerdo incluye la inversión de Canopy de entre 100 y 150 millones de dólares en las operaciones de cáñamo de AgriNextUSA en Nueva York.
El acuerdo plurianual de Canopy con HollyWeed North Cannabis consiste en procesar hoja seca de cannabis en una planta en Victoria BC para producir resina y aceite de alta calidad. Esto ayudará a Canopy a satisfacer mejor la demanda de nuevos productos comestibles que contienen CDB, que se espera lleguen a los mercados canadienses este año cuando se legalicen.
Durante el mes de marzo, Canopy también ha anunciado a bombo y platillo la ampliación de su asociación con la OG DNA Genetics, una marca de cannabis reconocida a nivel mundial, para introducir la reputada tecnología genética de la empresa en el mercado europeo. No se han divulgado los detalles del plan de expansión, pero la alianza ya está en vigor hasta finales de 2024.