El informe de empleos de Estados Unidos arrojó una cifra de unos 208.000 nuevos puestos de trabajo y un alza al 6,2% de la tasa de desocupación en julio.
Estos datos no decepcionaron a los mercados, si bien no fueron tan positivos como se esperaban. Pero el viernes, de todas formas, se vio marcado por los problemas que atraviesa un banco portugués, cuya estabilidad se ve en duda, y por el default de Argentina, no por la relevancia del país sudamericano en el contexto financiero global, que es mínimo, sino porque su caída dispara seguros de pago de default, impactando en bancos de primera línea, cuyos papeles cayeron fuerte al cierre del día.
El inicio de la semana no ofrece variantes relevantes en los pares principales. El dólar mantiene un tono alcista en todos los frentes, tal vez algo atenuado ante el euro y la libra esterlina, que podrían recuperar posiciones en la sesión americana.
La moneda única llegó el viernes a 1,3444, y en su cruce con el dólar presenta una bandera de continuación de un movimiento alcista de muy corto plazo, que de todas formas no alcanza a cambiar su dirección bajista dominante. Las resistencias que siguen se ubican precisamente en 1,3445, 1,3465 y 1,3490, con soportes en 1,3390 y 1,3365.
La libra esterlina, en tanto, rozó el viernes 1,68, aunque se recupera ligeramente en estas horas. No se ve una tendencia clara para el resto de la jornada, aunque la superación de 1,6855 podría extender las ganancias de la libra a la zona de 1,6875/80. Los soportes a seguir son 1,68 y 1,6760.
El yen, por su parte, el viernes perdió posiciones a 103,08, aunque inició desde allí una ligera recuperación, sin movimientos importantes en las últimas horas. Los soportes a seguir en el cruce USD/JPY serán 102,35, 102,15 y 101,90, con resistencias en 102,70, 103,05 y 103,35.
El festivo en Canadá mantendrá sin cambios al dólar local, que sigue presentando tendencia bajista ante el dólar, aunque se ve muy sobre vendido. En tanto, el dólar australiano se mantiene lateral, y sin oportunidades claras para el resto de la jornada.
En un día sin informes relevantes, la expectativa comienza a centrarse en los datos a conocerse durante el resto de la semana, dentro de los cuales se destacan los anuncios de política monetaria del Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo el jueves, y el ISM de servicios en Estados Unidos, previsto para el martes.