- Desde el BCE se insinúa la posibilidad de extender el programa QE
- Dudley, de la Fed espera que se produzca una subidas de los tipos, aunque septiembre ahora parece la fecha menos probable
Ayer vimos los primeros intentos de intervención verbal por parte del Banco Central Europeo (BCE) con el miembro de la junta ejecutiva del banco, Peter Praet, indicando que la expansión del QE es posible si los riesgos de deflación siguen aumentando.
Esta es una señal fuerte y establece la reunión del BCE del próximo jueves como clave ante las perspectivas políticas, así como, posiblemente, proporcionando un punto de pivote para los pares del euros.
Los comentarios de Praet ayudaron a limitar el impacto William Dudley, miembro de la Fed de Nueva York, quien dijo un repunte de los tipos de interés en septiembre por parte de la Fed es ahora menos convincente, aunque no descartó que esta subida de tasas pudiera llevarse a cabo antes de que finalizara el año.
Si rebote de la sesión de ayer en el mercado de renta variable/sentimiento de riesgo no era más que una celebración ante el retraso de la subida de tipos de la Fed, podría tener poco potencial pata que lo sigamos con atención por ahora.
Durante la noche, el gobernador del Banco de Japón (BoJ), Haruhiko Kuroda, se centró en las proyecciones de inflación de Japón, que siguen pareciendo curiosamente optimistas a la luz de los recientes acontecimientos y la fuerza del yen.
Esta noche conoceremos los últimos datos del IPC de Japón. Una de las razones por las que el yen no ha repuntado con más fuerza ha podido ser debido a las implicaciones que ha supuesto la devaluación de las principales divisas asiáticas y el fuerte repunte de en los tipos de EE.UU. ante los rumores de fuertes ventas chinas (lo que tiene todo el sentido, ya que es probable que el Banco Popular de China luche frente a una estampida de los flujos de capital fuera del país ante la devaluación del yuan).
Hay quizá un doble interés aquí, ya que tenemos una fuente del BCE hablando de la posibilidad de una expansión del programa de flexibilización cuantitativa si los riesgos deflacionistas empeoran, mientras que Kuroda por parte del BoJ sigue bastante optimista.
¿Podría esto significar una caída del euro-yen (EUR/JPY), independientemente de la dirección en el apetito de riesgo en este momento?
Fuente: Saxo Bank.
EUR/USD
El euro-dólar cayó ayer ante la intervención verbal de Praet y otro rebote en el sentimiento de riesgo desde cerca de los últimos mínimos, pero sigue "conectando" con la media móvil de 200 sesiones y necesita realmente hacer aún todo el camino a la baja a través de zonas de 1,1200 para que los bajistas tengan los argumentos convincentes de que nos dirigimos aún más a la baja.
Fuente: Saxo Bank.
El sentimiento de riesgo se mantiene como el conductor clave en todos los mercados en estos momentos, pero hay que tener en cuenta los riesgos de eventos tan importantes que tenemos por delante.
En el frente de datos, los datos de inflación PCE que conoceremos mañana en EE.UU. podrían captar algo de atención, pero sin duda habrá que estar atentos a la retórica de la conferencia de Jackson Hole este fin de semana para conocer o captar posibles pistas, ya que hablarán tanto el vicepresidente de la Fed, Stanley Fischer; así como Vitor Constancio del BCE; Mark Carney, del Banco de Inglaterra y Kuroda, del Banco de Japón.
Perspectivas de las principales divisas del G-10
USD: el dólar estadounidense está tirando con fuerza, pero no debemos olvidar que el sentimiento de riesgo tiene un largo camino por recorrer para borrar las implicaciones de la brutal ola de ventas que hemos visto en los últimos días.
Vamos a vigilar el apetito de riesgo habitual hasta el fin de semana, y luego poner atención a lo que Fischer nos tenga que contar este fin de semana.
EUR: la resistencia local del euro-dólar (EUR/USD) parece situarse en zonas de 1,1400, con la media móvil de 200-day en los mínimos alrededor de 1,1300 siendo el foco de atención en el día cerrando niveles. La zona de 1,1200 necesitaba una reversión completa del reciente repunte.
JPY: el par dólar estadounidense-yen (USD/JPY) parecer ser el barómetro del sentimiento de riesgo, mientras que el euro-yen (EUR/JPY) podría estar moviéndose ante una postura divergente de política monetaria. Esto podría significar que el yen se convirtiera en nuestra divisa ante cualquier nuevo movimiento de riesgo.
GBP: ayer vimos una fuerte caída en el par libra-dólar estadounidense (GBP/USD), pero si echamos un ojo a la falta de volatilidad en el euro-libra (EUR/GBP), nos sugiere que simplemente está siguiendo al GBP/USD y el momentum podría de repente llegar a detenerse cerca de la parte inferior del rango del par GBP/USD, que más o menos no está muy por debajo de niveles de 1,5500, salvo que veamos un catalizador inesperado. La libra es hoy vulnerable a cualquier debilidad del apetito de riesgo, especialmente en el par libra-yen (GBP/JPY).
CHF: el franco suizo (CHF) no es una refugio seguro frente al euro en tiempo de turbulencias. Generalmente prefiero centrarse en la debilidad del franco suizo, pero esto puede no manifestarse hasta que vayamos más allá de este episodio de volatilidad del mercado.
AUD: debilidad en el dólar australiano (AUD) ante la debilidad de las materias primas así como de los datos que hemos visto durante la noche. La zona de 0,7150 en el dólar australiano-dólar estadounidense (AUD/USD) se ha desarrollado como resistencia local ya que la atención se mantiene a la baja.
CAD: el dólar canadiense (CAD) también se muestra débil ante los bajos precios, con la zona de 1,3200 como soporte en el dólar australiano-dólar canadiense (USD/CAD).
NZD: el par dólar australiano-dólar neozelandés (AUD/NZD) está mostrando señales de intentar querer hacer algo de soporte, por lo que mi estrategia preferida sería estar cortos en la divisa de Nueva Zelanda en vez de cortos en la divisa australiana.
La zona de 1,0900 sería la zona clave de soporte para el par AUD/NZD. En lo que respecta al dólar neozelandés-dólar estadounidense (NZD/USD), aún no ha trabajado por debajo de 0,6500 y mantiene la atención del lado bajista.
SEK: la corona sueca probablemente se está debilitando desde una prospectiva de valoración, pero el mercado podría estar contento de seguir vendiendo si somos testigos de otra crisis de riesgo. La zona de 9,60 parece una zona de pivote tras las ventas que vimos ayer desde nuevos máximos.