EUR. El euro repuntó durante la mañana de ayer, pero no pudo mantenerse, perdió algo del terreno avanzado durante el día para acabar con sólo pequeños avances al cierre de la jornada. Sin embargo, la debilidad de la libra esterlina por la falta de acuerdo con respecto al Brexit impulsó al euro a alcanzar su máximo nivel en 11 meses en el par GBPEUR, pese a no contar con datos macroeconómicos relevantes a este lado del charco. Hoy, el calendario sigue tan holgado como ayer, y sólo podría requerir nuestra atención la publicación del boletín económico del Banco Central europeo, a las 10.00 CEST. El debate en torno al presupuesto del nuevo gobierno italiano podría también atraer la atención de los analistas e influir en el devenir de los mercados de renta fija, lo que, por supuesto, tendría consecuencias también en los mercados de divisas.
GBP. La libra esterlina fue ayer la moneda que salió peor parada de todo el panel de divisas del G10. Esta mañana la libra esterlina no ha tenido un buen comienzo, sobre todo frente al euro, puesto que ha caído hasta su nivel mínimo en 11 meses, aunque a partir de ahí ha logrado recuperar, con mucho esfuerzo, parte de las pérdidas sufridas a primera hora. La preocupación con respecto al Brexit sigue pesando sobre la libra esterlina, y al no contar con datos macroeconómicos de primer orden ni con titulares positivos relativos al Brexit, los inversores siguen vendiendo libras para favorecer al dólar. Los inversores no comerciales mantienen posiciones netas vendedoras en la libra, y al agudizarse las posiciones cortas, la sensación de desconfianza de los inversores mantiene la presión sobre la libra esterlina. Y no parece que la libra vaya a poder tomarse un respiro hasta después del fin de semana, cuando se publicará el dato del producto interior bruto. Hasta entonces, la atención se centrará en si el par GBPEUR puede mantenerse por debajo de su rango de cotización en las últimas jornadas.
USD. El índice DXY del dólar, que incluye un amplio rango de indicadores, comenzó fuerte la jornada y el dólar avanzó frente a dos de los principales componentes del DXY, el euro y la libra esterlina. El par USDJPY, otro de los principales componentes del índice DXY, mantuvo la tendencia a la baja durante toda la jornada, mientras se extendían los rumores de que el Banco de Japón se planteaba políticas más restrictivas. Mientras el euro recuperaba con esfuerzo sus pérdidas, el índice DXY abandonó su nivel más alto para caer 0,34%, y de hecho, acabó el día en números rojos. Esta mañana, parece que, una vez más, el dólar va a recuperar las pérdidas acumuladas durante la semana, con la publicación, a las 14.30 CEST, de la inflación conforme al índice de precios de producción. Con una economía estadounidense que continúa con un crecimiento robusto, y con los datos de inflación por el lado del consumo por encima del objetivo, podría ser la inflación que viene del lado de la producción la que sorprenda al alza, mientras las expectativas para julio se mantienen en un 3,4% interanual.
CAD. El dólar canadiense, que normalmente es una de las monedas del panel de divisas del G10 que se mantiene en un segundo plano, fue sin embargo una de sus principales estrellas, al ocupar las noticias la caída del 3% en los precios del petróleo, los problemas diplomáticos con Arabia Saudí y el inicio de una nueva ronda de negociaciones en el NAFTA. El CAD se mantuvo sorprendentemente tranquilo ante todas estas circunstancias e incluso logró avanzar frente a la mayoría del resto de divisas, excepto frente a las monedas refugio tradicionales como JPY y CHF. Los comentarios positivos del ministro de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo, pronunciados tras dos horas de reunión con el representante estadounidense para el comercio Robert Lighthizer ayudaron a impulsar la fortaleza del CAD. El llamamiento hecho por Arabia Saudí, por el que pedía a sus inversores que vendieran sus posiciones en dólares canadienses perdió impulso frente a la posibilidad de alcanzar un nuevo acuerdo sobre el NAFTA, que tuvo un impacto mucho mayor sobre la economía canadiense.