Las acciones de Deutsche Bank (DE:DBKGn) han caído un 60% desde agosto de 2015, debido a la incertidumbre sobre la economía europea, la regulación futura del sector o los costes de litigio y, en última instancia, el impacto de las tasas negativas en la zona euro.
No obstante, los fundamentales están mejor que en 2009 y 2011 ya que su base de capital es más fuerte y el beneficio de las operaciones orgánicas subyacentes no han cambiado. Todo esto significa que la valoración actual está descontando un gran aumento de capital o una caída en los beneficios.
La ponderación de activos de riesgo de Deutsche Bank es de 400bn de euros. Sólo el 1% de retorno después de impuestos sobre esos activos es suficiente para fijar el precio del Deutsche Bank en un P/E 5x que está muy por debajo de sus homólogos.
Creemos que lo que vamos a ver ahora es una nueva fijación de precios de las acciones, ya que los inversores comienzan a mirar de forma más realista al capital y el beneficio subyacente.
Gestión de la estrategia:
Los riesgos clave para esta estrategia son un aumento del sentimiento de risk-off, así como una ampliación de los diferenciales de crédito, o un resurgimiento de la crisis griega.
Parámetros de la estrategia:
Comprar: Deutsche Bank a mercado con un precio de trailing stop de 11,11 euros, en pasos de 0,21 euros.