El dólar americano es impulsado al alza nuevamente frente al yen japonés, pero de manera notoria falla en romper el máximo de octubre por sobre los 110.00. Un cierre diario bajo los niveles 107.89-108.00, zona soportada por el mínimo del 2 de octubre y por el nivel 23.6% del retroceso de Fibonacci expone el nivel de 38.2% a 106.54.
Alternativamente, una reversión por sobre el 110.08-19, área marcada por el nivel 23.6% de la expansión de Fibonacci y máximo del 1 de octubre abre las puertas para desafiar el máximo del 15 agosto del 2008 en 110.65.
Una divergencia negativa del RSI insinúa la disminución del impulso alcista, advirtiendo en contra de entrar en largo. Además, los precios están muy cerca de la resistencia para justificar comprar el par desde la perspectiva de riesgo/recompensa. Por el otro lado, la ausencia de señales bajistas definidas argumenta que entrar en corto es prematuro. Nos mantendremos sin movimientos por ahora.