Comienza la bajada sin frenos del precio del petróleo que tanto se esperaba.
Y es que se han juntado muchos factores para que esta se produzca:
1.- La economía de los países desarrollados esta entrando en recesión, la inflación se ha disparado en los países más importantes del mundo y mucha culpa de esta, la tiene el precio de la energía, que a su vez ha hecho subir el precio de los transportes, la espiral sigue con la subida de todos los productos por este incremento de coste del transporte y todo ha terminado en un menor poder adquisitivo, un menor consumo y una inflación galopante.
Estados Unidos, la locomotora económica del mundo con permiso de China, ha dicho basta, han entrado oficialmente en recesión, y ya no van a permitir que el precio del petróleo les arruine.
El Gobierno de Joe Biden, ha tomado cartas en el asunto y ya está llegando a acuerdos con los principales exportadores de petróleo para que aumenten su producción.
Este aumento de producción, unido con el decremento del PIB, va a provocar un incremento en los stocks de petróleo y por tanto un descenso importante en su precio.
2.- A nivel técnico, tanto la cotización de los futuros del barril de Brent, como los del crudo del mar del norte han roto hacia abajo ya claramente los 100 dólares y les espera un recorrido bajista hasta las proximidades de los 60 dólares.
3.- En la mente de los inversores sigue lo que pasó hace unos años con el precio del petróleo y que hizo arruinarse a muchos de ellos que se lo habían jugado todo a ponerse cortos en sus posiciones. La cotización se puso por debajo de 0 dólares, se cerraron posiciones y con ello hubo nuevos arruinados.
4.- Rusia parece que está comenzando a ver que la guerra que está librando con Ucrania no va a ninguna parte, su economía se está poniendo insoportable y poco más va a poder aguantar en esta situación.
Todo está perfecto para que el precio del petróleo descienda de forma rápida en un breve periodo de tiempo.