Parece probable que el Banco de Japón será el único banco central importante que no aumentará sus tasas de interés este año. Esta es una gran razón por la que los inversores se mantienen alejados de la moneda nipona.
El yen solo sigue cayendo. El USD se encuentra ahora en alrededor de 114 JPY, el nivel más alto de debilidad del yen desde mediados de mayo, en comparación con los niveles de alrededor de 100 JPY en septiembre de 2016. Los movimientos del JPY contra el euro han sido similares. La caída del JPY está impulsada por el ajuste monetario de otros bancos centrales: en primer lugar, la Reserva Federal de Estados Unidos, luego el BCE, con movimientos similares previstos para el Banco de Inglaterra, el Banco de Canadá, el Banco de Noruega y el Banco de Suecia.
Mientras tanto, nada ha cambiado en la política monetaria del Banco de Japón. La institución japonesa aún está programada para comprar una cantidad ilimitada de bonos con un rendimiento definido.