En solo dos meses, la deuda pública de Estados Unidos ha crecido la astronómica cifra de 600.000 millones de dólares (línea azul en el gráfico). A su vez, la suma total ha sobrepasado el umbral de los 20 billones de dólares.
En esta ocasión, Simon Black decidió llamar la atención sobre algunas cuestiones estrechamente relacionadas con la deuda. Llegados a este punto, prácticamente casi todos los impuestos recaudados en Estados Unidos están destinados a la seguridad social, la salud y al pago de los intereses de la deuda. Para cubrir los gastos restantes, Washington debe continuar endeudándose. Se puede decir que el país con la economía más grande del mundo está en quiebra.
La deuda aumenta rápidamente, mientras que ningún cambio en los impuestos puede mejorar la situación. Es imposible que se dé un escenario donde, de repente, se recauden más impuestos y por consiguiente se puedan cubrir los gastos.
¿Cómo se sabe esto? En las últimas décadas, los impuestos estadounidenses han cambiado con frecuencia, pero el nivel de los ingresos estatales casi siempre ha oscilado alrededor del 17% del Producto Interior Bruto. Por lo tanto, un posible aumento en los impuestos podría más dañar a la economía que salvar el presupuesto. Por otro lado, un aumento de la tasa dispositiva no da ninguna garantía de recaudar más dinero, porque la gente podría empezar a defraudar impuestos.
Por otro lado, el fondo de pensiones y seguridad social estima que a partir de 2034 su presupuesto no permitirá realizar su actividad correctamente. Esto significa que las actividades del fondo dependerán de los impuestos recibidos. Mientras tanto, en 2034 la mayor parte del dinero de los contribuyentes se destinará al pago de la deuda. Como se puede ver, en este momento la situación se vuelve, diciéndolo delicadamente, complicada.
Marc Faber ha hecho muchos análisis sobre el sistema de pensiones y el Estado, que está demasiado burocratizado. Señaló que el sistema de pensiones es un experimento. En nuestros días, es un elemento constante de la sociedad, pero la atención social no ha existido durante miles de años y no estamos seguros de que esté presente durante los próximos 50 o 100 años.
La situación actual en los Estados Unidos nos recuerda que tendremos que ocuparnos nosotros mismos de nuestro futuro financiero. En mi opinión, el Gobierno puede que siga pagando pensiones durante 20-30 años, pero creo que el dinero recibido no permitirá una jubilación digna.
Por otra parte, es un hecho conocido que Alemania en los años treinta precipitó su invasión a Polonia porque estaba al borde de la quiebra. Esperemos que la historia no se repite esta vez.