En esta ocasión vamos a analizar dos aspectos importantísimos en el trading: por un lado, el aspecto psicológico de la soledad del trader y por otro, la importancia de cuidar la vista ante las pantallas. Para este segundo apartado, el de cuidar la vista, he pedido consejo a una buena amiga mía que es oculista y también swing-trader.
El trader, por definición, es un bicho raro y solitario. De hecho, suele darnos vergüenza el decir a qué nos dedicamos. "Vergüenza" quizás no sea la palabra más indicada, pero sabemos que hay poca gente que sepa, conozca o entienda lo que es operar en los mercados financieros.
Hace tiempo que personalmente perdí esa “vergüenza”, pero antes tuve que aprender a gestionar el miedo, esa cosilla que nos advierte de que somos algo diferentes los traders.
Me centraré en analizar y explicar desde la vertiente terapéutica o psicológica cómo gestionar esa soledad.
Para comenzar, diremos que los operadores solemos encontrarnos solos ante las pantallas, sin recibir indicaciones de nadie, ni dar explicaciones de nuestras decisiones a ningún jefe o compañero, esto nos suele hacer algo vulnerables y provoca que acabemos autoengañándonos en muchas ocasiones.
Recordemos que solo nosotros somos los únicos responsables de nuestros éxitos o nuestros errores, porque "fracaso" es una palabra que no recojo en mi diccionario.
El conocer esa debilidad debe hacernos conscientes de que en el trading no sirven las excusas. Si te equivocas, te has equivocado tú. No me sirve aquello que todos hemos pensado o pensaremos de que “es que han esperado a que meta la orden para sacarme”, o “me están vigilando y esperan que entre para sacarme perdiendo”… ¡Venga ya! Sabes que no es así, asúmelo. Es parte del aprendizaje, no le des más vueltas.
Cuando al fin hemos aprendido que eso es así, nos preguntamos en cómo mejorar. Eso no es que sea muy complicado, pero sí algo más complejo que deberá buscar lo mejor de ti para progresar. Céntrate en lo que hemos descrito en anteriores artículos en enneatrading, como el de por dónde empiezo, el de gestión monetaria y emociones, el que habla del por qué hacer un diario emocional o algunos otros sobre el trading plan, la operativa… artículos que están ahí para que puedas leerlos y trabajarlos cuando y donde desees.
Lo importante es que pongas de tu parte o busques a alguien que te ayude a conseguir tus objetivos, resultados, mejorándote tú y mejorando tu sistema y la operativa.
¿Eso lo tienes claro, no? Si no es así, plantéatelo, siempre estarás a tiempo.
Podríamos describir muchos más aspectos emocionales que nos van saliendo a medida que vamos aprendiendo o progresando en la operativa, pero creo que lo más interesante en este artículo es entender que esta actividad es solitaria, en un principio. Digo en un principio, porque es cierto que somos nosotros los únicos responsables de nuestras decisiones, pero también podemos acercarnos a otros traders, a otras operativas, a trabajar de forma conjunta con sistemas similares y operativas cercanas.
Y hablando de soledad, quiero contaros en qué consiste el síndrome de las pantallas del trader. Así lo ha definido mi amiga trader y paso a describirlo brevemente. Sus consejos nos ayudarán a no dejarnos las pestañas ni la vista en las pantallas del ordenador o portátil que utilicemos en nuestra operativa. Este síndrome viene a recoger científicamente la fatiga visual que nos produce al estar muchas horas ante las pantallas viendo gráficos, leyendo artículos y poniendo operaciones.
La fatiga visual debemos entenderla no tanto como una enfermedad, sino como un síntoma y por tanto, es interesante ponerle remedio antes de que se agravie el problema. Es importante entender que la luz indirecta en nuestro espacio de trabajo es esencial y cuanto más natural sea, mejor.
Síntomas como la pesadez en los ojos, pinchazos, parpadeos constantes, pérdida de nitidez, colores nuevos, vista cansada o nubosa, ojos rojos y llorosos, sequedad ocular… Todo ello muchas veces es ocasionado por no tener cura de solucionar los aspectos de visión.
Dependiendo de la resolución de la pantalla, los gráficos son más pequeños y los colores diferentes. Cuanto más pequeña es la pantalla, más nitidez estamos requiriendo a nuestros ojos, y si tienen un pequeño defecto de graduación, más sobre-esforzamos el mecanismo de enfoque. La tendencia generalizada es a poner la máxima resolución que el monitor nos permita.
Normalmente el mecanismo de enfoque tiene que estar trabajando activamente en la visión de cerca. La pantalla de ordenador se sitúa cerca de los ojos, con lo que ya tenemos un esfuerzo de base. El gesto inconsciente que tenemos de acercarnos al monitor cuando la letra es muy pequeña, hay que detectarlo. A veces esa circunstancia es contraproducente, cuanto más cerca enfocamos, más forzamos al ojo.
Las soluciones se pueden deducir fácilmente de las causas explicadas: utilizar gafas en caso de graduaciones no corregidas, ponernos las lágrimas artificiales si hay ojo seco, etc.
Vamos a enumerar también algunos de los posibles remedios para no dejarnos la vista en las pantallas:
1. Pausar 5 minutos cada hora. Eso puede ser suficiente, pero conviene apartar la mirada de la pantalla durante un rato, a ser posible enfocando de lejos. El músculo del ojo se mueve y se relaja.
2. Utilizar una resolución de pantalla adecuada. Lo importante es no acercarse a la pantalla para ver mejor, eso evidencia que está mal regulada.
3. Es importante colocar el monitor en la posición adecuada. Ni muy cerca para no tener que acomodar demasiado (y que no nos fatigue tanto la fuente de luz), ni muy lejos evitándonos ver las letras de forma correcta. La tendencia natural es acercarse mucho el monitor, así que en general tendremos que alejarlo un poco. Y en cuanto a altura, esto es muy importante: un poco por debajo de los ojos, a poder ser.
Ten presente que has de lidiar con la soledad del trader y por otro lado, ya sabes que debes remediar y mirar adecuadamente los gráficos en las pantallas para no perjudicarte la vista.
Hasta la “buena vista” y "buen trading", compañer@.