El FMI recortó el martes su estimación de crecimiento de la economía global por segunda vez desde abril y advirtió a funcionarios europeos y estadounidenses que la desaceleración se prolongaría si no logran corregir los problemas de sus economías.
El crecimiento global es demasiado débil para disminuir el desempleo y el poco impulso que existe viene principalmente de los bancos centrales, dijo el Fondo Monetario Internacional en su Panorama Económico Mundial, divulgado antes de su reunión bianual que se realizará en Tokio posteriormente esta semana.
“Un tema clave es si la economía mundial se ha topado con un nuevo brote de turbulencia, en lo que siempre se esperó que fuera una lenta y agitada recuperación, o si la actual desaceleración tiene un componente de mayor duración”, dijo.
“La respuesta depende de si los funcionarios europeos y estadounidenses lidian proactivamente con sus grandes desafíos económicos de corto plazo”, agregó.
Para el 2012, el FMI espera ahora que el Producto Interno Bruto (PIB) global crezca sólo un 3,3 por ciento, por debajo de su estimado de julio del 3,5 por ciento, lo que representaría el ritmo de expansión más lento desde el 2009.
El organismo predijo una modesta recuperación el próximo año a un 3,6 por ciento, por debajo de su estimación de julio de un 3,9 por ciento.
Aún se espera que los mercados emergentes crezcan cuatro veces más rápido que las economías avanzadas, pero el panorama del FMI recortó fuertemente sus estimaciones para India y Brasil, con el gigante latinoamericano creciendo a una tasa menor que la de Estados Unidos este año.
El FMI dijo que fuerzas “conocidas” estaban desacelerando el crecimiento de las economías avanzadas: la consolidación fiscal y un sistema financiero aún débil, los mismos problemas que han perseguido al mundo que estalló la crisis financiera mundial en el 2008.
“Sin embargo, parece que hay más cosas operando que estas fuerzas mecánicas, concretamente, una sensación general de incertidumbre”, dijo el principal economista del FMI, Olivier Blanchard.
Las mediciones del riesgo y la incertidumbre, como el índice de volatilidad VIX en Estados Unidos, siguen en niveles bajos, apuntó Blanchard, lo que hace difícil evaluar la naturaleza de la incertidumbre.
Blanchard la describió como “de naturaleza más Knightiana”, refiriéndose a un término para el riesgo que es imposible de medir, nombrado en honor del economista Frank Knight.
“Las preocupaciones sobre la capacidad de los funcionarios europeos para controlar la crisis de la zona euro y las preocupaciones sobre el fracaso hasta la fecha de los funcionarios estadounidenses para acordar un plan fiscal seguramente juegan un papel importante, pero uno que es difícil de determinar”, dijo Blanchard.
El FMI dijo que las condiciones financieras posiblemente seguirán “muy frágiles” en el corto plazo debido a que reparar los problemas de la zona euro tomará tiempo y hay preocupaciones sobre cómo lidiará la economía de Estados Unidos con el esperado fin de los recortes tributarios a comienzos del próximo año.
Para Estados Unidos, el FMI dijo que sus “prioridades urgentes de política” deberían incluir el evitar el llamado “abismo fiscal” derivado de la esperada alza de impuestos y recortes al gasto, aumentando el límite de endeudamiento del Gobierno, y acordando un plan creíble para reducir el déficit.
El FMI dijo que el abismo fiscal en el peor escenario equivaldría a un retiro fiscal de más de un 4 por ciento del PIB en 2013, y que el crecimiento económico se estancaría.
Sobre la zona euro, dijo que resolver la crisis es la mayor prioridad y que se necesitaría de avances hacia una unión bancaria y fiscal.
“Si la incertidumbre está de hecho detrás de la actual desaceleración, y si la adopción e implementación de estas medidas disminuye la incertidumbre, las cosas podrían resultar mejor que nuestras estimaciones, no sólo en Europa, sino también en el resto del mundo”, dijo Blanchard.
“Yo estaría feliz si nuestras estimaciones iniciales resultan ser imprecisas, en este caso, demasiado pesimistas”, agregó.