El GBP/USD cerró la semana pasada con una caída y arrancó la actual en el mismo sentido. La recuperación que le había seguido a la decisión de la Reserva Federal, rápidamente se topó con resistencia por debajo de 1.5000. Dicho nivel aún sigue limitando las subas.
La tendencia de largo plazo sigue bajista, aunque en el corto plazo hay indicios de consolidación que podrían continuar, siempre que el precio se mantenga por encima de 1.4700. El quiebre y laconfirmación debajo de este abrirán las puertas para un descenso hacia 1.4500 y por debajo de este el próximo soporte de mediano plazo se ubica en 1.4330.
La tendencia seguirá negativa incluso con una corrección alcista. Recién una suba por encima de 1.5300, daría señales de mediano plazo a favor de la libra; ya que la cotización habrá superado la media móvil de 20 semanas y una línea de tendencia bajista.