GBP/USD logró cerrar el viernes por encima de la media móvil de 20 días por primera vez en un mes. Esto le da un soporte a la libra.
En el corto plazo se mantiene el momento alcista, aunque las subas siguen limitadas por 1.50; una consolidación por encima habilitará a una suba mayor.
La tendencia en el mediano plazo sigue bajista, recién una suba por sobre 1.5250 podría modificar este escenario.
A la baja un cierre en niveles inferiores a 1.4800 debilitará al par, dejando expuesto el próximo soporte clave que es 1.4700.