El paladio, el metal utilizado para la fabricación de los convertidores catalíticos de los automóviles con motores de gasolina para transformar gases contaminantes en emisiones menos nocivas, ha registrado máximos históricos hoy, acercándose al nivel de 1.500 dólares en su quinta jornada consecutiva al alza.
La meteórica subida del precio del metal precioso viene impulsada por la combinación de un prolongado déficit de oferta y un aumento de la demanda, consecuencia de los cada vez más estrictos requisitos ambientales y las exigentes regulaciones sobre las emisiones.
El problema cuando se alcanzan máximos históricos es que, por definición, no hay ningún nivel de resistencia previsto que propicie un posicionamiento en corto. Además, existe el riesgo de un retroceso tras posicionarse en largo. Aunque es emocionante lanzarse a un activo después de buenas noticias, también podría ser el peor momento para hacerlo, pues los traders que entraron antes de los titulares son los que están recogiendo beneficios.
Esta posibilidad destaca por la formación de una media móvil alcista, con cada una de las MM por encima de otra más larga, así como los indicadores de sobrecompra del RSI y la MMCD. Por lo tanto, recomendamos esperar a comprar en un descenso.
Estrategias de trading
Los traders conservadores deberían esperar una corrección a la baja de la línea de tendencia alcista desde mediados de agosto, en el nivel de 1.350 dólares, para demostrar la demanda, con al menos una vela larga verde envolviendo una vela roja o una pequeña de cualquier color.
Los traders moderados podrían contentarse con un descenso hasta el nivel de 1.400 dólares, por encima de los máximos de mediados de enero, con signos de consolidación en ese nivel y por lo menos una vela larga verde después de una vela roja o una pequeña de cualquier color.
Los traders agresivos podrían posicionarse inmediatamente o esperar a un descenso intradía, con la esperanza de que los máximos históricos atraigan nueva demanda, impulsando los precios. Deberían colocar una orden de minimización de pérdidas según las consideraciones de la gestión monetaria, en ausencia de un nivel de apoyo cercano.
Ejemplo de operación
Entrada: 1.470 dólares
Orden de minimización de pérdidas: 1.469 dólares
Riesgo: 1 dólar
Objetivo: 1.500 dólares
Recompensa: 30 dólares
Relación riesgo-recompensa: 1:30