La confianza en el riesgo se ha recuperado ligeramente durante la noche de hoy, aunque todavía sigue frágil debido a que los inversores han tenido reacciones encontradas sobre los diferentes planes de flexibilización cuantitativa por parte de la Fed, el BCE y el BoJ. De hecho, la inyección de mayor liquidez puede causar una presión inflacionaria global, aunque al mismo tiempo es el combustible necesario para reactivar la economía. Durante la noche, los inversores se han decantado a favor de los aspectos positivos de la política monetaria, después de que durante la sesión del jueves se haya negociado con debilidad en los mercados asiáticos y europeos.
El Hang Seng de Hong Kong avanzaba un 0.74% hasta los 20744.16, mientras que, sin embargo, el índice del Compuesto de Shanghai de China continental caía un 0.07%, no pudiendo recuperarse de la caída del jueves debido a la endeble perspectiva en los datos manufactureros chinos. El Nikkei 225 crecía durante la sesión asiática ya que las acciones de servicios públicos y defensa aumentaron por las preocupaciones de que la última ronda de QE no sea suficiente para garantizar un fuerte crecimiento. El dólar australiano se apreciaba durante la noche frente a todas las monedas del G10, experimentando las mayores ganancias frente a la corona sueca (+0.49%), el dólar estadounidense (+0.35%) y el franco suizo (+0.28%). La moneda ha bajado durante la mayor parte de la semana debido al evidente tono pesimista del RBA en sus actas de política monetaria, así como por los problemas del crecimiento chino y por las tensiones geopolíticas entre China y Japón.
El dólar australiano logró repuntar ayer a pesar del anuncio de que se cancelaba un nuevo proyecto minero. El par EUR/AUD ha estado evolucionando a la baja desde el jueves, perdiendo casi un 1.18%, ya que el euro ha perdido frente a sus principales homólogos. El par se está negociando ahora mismo en 1.2402, y se desliza a la baja hacia el Bollinger MA a 20 días en 1.2272. Para hoy no se espera que el par pierda mucho más debido a que no se esperan la publicación de datos económicos importantes ni tampoco están previstas comparecencias destacadas.
En Europa, el PMI de la eurozona alcanzó su nivel más bajo en 11 meses, marcando la cifra de 45.90, ligeramente por debajo de la esperada. El sector manufacturero alemán se comportó mejor de lo previsto en 47.3, y la subasta de bonos españoles tuvo una participación relativamente buena ya que el Tesoro vendió 4800 millones de euros en vez del rango previsto que se situaba entre 3500 y 4500 millones de euros. A pesar de las positivas noticias sobre la subasta española las bolsas europeas y el euro no consiguieron repuntar. Creemos que el euro seguirá su movimiento bajista hasta el cierre en EEUU.