Durante la sesión asiática podríamos experimentar gran movimiento en el mercado, particularmente en los cruces del yen. En Japón se conocerán varios indicadores macroeconómicos relevantes: inflación, tasa de desempleo, producción industrial (preeliminar), ventas minoristas y luego se cerrará con inicio de viviendas. La cantidad de datos a publicarse obliga a prestar atención. Por si fuera poco, en el medio de todo esto, tendremos la decisión de política monetaria del Banco de Japón, que posiblemente sea más importante que todos los datos juntos y los opaque. Hay varias especulaciones sobre lo que la autoridad monetaria podría hacer, desde no anunciar nada nuevo, hasta una gran inyección de liquidez. Las especulaciones están a la orden del día y posiblemente aumentarán cuando se aproxime el anuncio. Obviamente en cuanto a tasas de interés no se espera ningún cambio. El banco está siendo últimamente objeto de presiones políticas para que actúe dando más estímulos monetarios a la economía y para alcanzar el objetivo de que la inflación llegue al 1%.
La mayor probabilidad está del lado de un aumento en JPY5 billones, del programa de compras, aunque el banco también podría extender la madurez de su cartera actual o incrementar sus operaciones de provisión de fondos.
El impacto del anuncio del banco central sobre el yen es totalmente incierto. A priori dependerá de la magnitud del anuncio. Si es juzgado como pequeño o insuficiente, posiblemente vamos una suba inicial del yen y luego una caída. Pero no hay que descartar por otro lado, dos cuestiones: 1) el yen se ha estado apreciando en los últimos días considerablemente, lo que podría limitar las subas; 2) un anuncia de alto impacto (que no se está dando) podría debilitar al yen. En definitiva, hay demasiados factores a tomar en cuenta, por lo que no está claro, ni que medidas se implementarán, ni el potencial impacto.
Luego de las decisiones habrá una conferencia de prensa de las autoridades del Banco de Japón y además se publicará el informe de perspectivas económicas, que incluye proyecciones que pueden también tener algún tipo de impacto.
El jueves cuando finalizó la sesión americana, la agencia calificadora S&P rebajó la nota de España. El viernes se esperan más repercusiones de dicha medida ya que ocurrió mientras los mercados europeos estaban cerrados. Por otra parte, podríamos ver más rebajas pero esta vez por parte de Moody’s a bancos comerciales de la región.
En Suiza se publicará el índice de indicadores de KOF y a su vez hablará el flamante presidente del Banco Nacional Suizo en la junta anual de accionistas. Se espera que no diga nada raro y sus palabras podrían pasar desapercibidas por el mercado.
Una hora antes de la apertura de la operatoria formal en Wall Street, se publicará uno de los informes más importantes de la semana, será la primera lectura sobre el crecimiento del producto bruto interno (PBI) de Estados Unidos durante el primer trimestre del 2012. Las analistas hablan de una expansión en torno al 2,25% - 2,50% y ya mencionan que en el segundo trimestre se crecería a una tasa más lenta, pero esto será debate dentro de tres meses.
Los efectos sobre el dólar no están claros. Es de esperar que buenos datos potencien al dólar, aunque si impulsan al apetito por el riesgo, las subas serían limitadas. Por otra parte, un mal dato dejaría mal parado al dólar de cara al futuro (tal vez no en la sesión misma del viernes, aunque algún impacto debería sentir al menos momentáneamente), ya que se potenciarían las palabras de Ben Bernanke del miércoles de que las puertas para más estímulos siguen abiertas.
Finalmente se publicará el indicador de confianza del consumidor elaborado por Thomson Reuters y la Universidad de Michigan. Este será el último dato de una semana cargada.
En resumen, será un cierre de semana con interesantes condimentos. Lo más importante vendrá por Japón y EE.UU. y a último momento se coló España. Antes de la rebaja, se esperaba una jornada relativamente calma en el mercado de bonos europeos (salvo una mala colocación de deuda en Italia). En el forex, el dólar se encaminaba a cerrar la semana debilitado, pero todo puede cambiar, particularmente con el flujo de información que conoceremos y luego de que se fortalezca tras el cierre del jueves, impulsado por la rebaja de nota en España.