Jurassic Power: El futuro de nuestros políticos en mano de los pobres pensionistas

La verdad es que no me suele gustar meterme en donde no me llaman, pero algunas veces no puedo evitarlo y he aquí el caso.

Leía el otro día en prensa un artículo de opinión en el que su articulista se quejaba porque consideraba que las pensiones de nuestros abuelos eran demasiado altas, que estaban entre las más altas del mundo. Pues bien, antes de entrar en materia y despacharme a gusto, le voy a sugerir al susodicho que, si a él le parecen realmente altas, no tiene más que contactar con el ministro de turno en esta materia, que le recibirá complaciente, para sugerirle que establezca una lista a la que todos aquellos españoles que, como él, piensen que las pensiones de los españoles son demasiado altas, puedan adherirse para que, en un futuro, cuando lleguen a su edad de jubilación, cuando les toque la vez, les recorten sus pensiones sin perjudicar al resto de los jubilados que no opinen como ellos. España y el resto de los pensionistas españoles les agradecerían este gesto y su esfuerzo personal para ayudar a aquellos jubilados que, a diferencia de los listados, necesitan de una pensión digna para vivir sin estrecheces el último tramo de su vida, después de haber trabajado duramente y de haber cotizado a la Seguridad Social debidamente durante décadas, algo que al parecer se olvida ahora, cuando no viene bien al presupuesto del estado.

Lo que no contaba el periodista en el artículo es una realidad mucho más dura, una realidad que pone en jaque a nuestros jóvenes políticos, y que muchos esconden o tratan sobre ella difusamente, sin ir al grano. ¿Y cuál es esta realidad? No es otra que no pueda justificarse con algo tan sencillo, y a la vez tan complejo, como una pirámide de población proyectada al 2031, a cuyas puertas estamos, pues no queda siquiera una década para llegar a esta fecha.

Pues bien, a fecha 2031, lo que no nos cuentan nuestros políticos y gobernantes que andan en la cuarentena, es que gran parte de ellos ya habrán superado los 50 años, y lo que es peor, no sólo ellos habrán superado esta edad, sino que también lo habrá hecho  más del 50% de la población española. Si a ello le unimos que los menores de 18 años, sin derecho a voto, representarán en 2.031 aproximadamente un 15% de la población española, resulta que, en la franja de edad que va desde los 19 años a los 50 años, sólo quedaría un 35% de la población, franja de edad en la que ahora habitan una importante mayoría de los políticos que nos gobiernan o que pretenderán gobernarnos a futuro. Por tanto, si asumimos una población de 46.150.000 españoles en 2031, y que tendría derecho a voto aproximadamente el 85% de esa población, o lo que es lo mismo, 39.227.500 españoles, los mayores de 50 años, que serían algo más de 23.075.000 personas en 2.031, representarían aproximadamente un 59% de la población con derecho a voto. ¡Ahí es nada!

Y los lectores se preguntarán: ¿Por qué digo esto? Pues lo digo porque si en España se mantiene la democracia, algo que no voy a ponerme a cuestionar en este artículo, resultaría que cada persona mayor de 18 años en 2.031 tendría derecho a un (1) voto, por lo que aproximadamente el 59% de los votos estarían en manos de gente mayor de 50 años, también llamados “futuros pensionistas”.

He establecido el corte en los 50 años porque creo que es a partir de esa edad cuando las personas prudentes empiezan a pensar en su jubilación y, créanme, al menos créanme los políticos, que a esa gente mayor de 50 años no les suele gustar escuchar de sus gobernantes de turno mensajes como el de nuestro articulista iluminado, o el de alguno de nuestros políticos, insinuando que hay que recortar las pensiones de nuestros mayores porque son insostenibles, porque el sistema actual de pensiones es deficitario o porque las arcas del estado no dan de si para ello. Ya les digo yo que no, que si empiezan a escuchar esas majaderías, dentro de unos años, estos mayores de 50 años, que representarán al 59% del electorado, no tardarán en organizarse como un movimiento político, que podría a bien llamarse “Partido de los Pensionistas Españoles”. ¡Perdón, las siglas PPE podrían no ser aceptables por su similitud con la de uno de nuestros partidos políticos! No hay problema, se escoge otro nombre para dar cabida a todos los mayores de 50 años, como por ejemplo: “MOVIMIENTO JURASSIC POWER” (MOJUPO).

Y ustedes me dirán: ¿A quién votarán en 2031 los españoles mayores de 50 años si ven amenazadas sus pensiones y se presenta a las elecciones el MOJUPO? Pues, simplemente, denle una pensada, que seguro llegarán a la misma conclusión a la que he llegado yo.

Lo que expongo arriba, el Jurassic Power, es una realidad férrea, insoslayable, yo diría que brutal, e incluso algo peor, una realidad fatal de la que depende el futuro de nuestros políticos, al menos de aquellos que quieran gobernarnos dentro de unos diez años.

Por mucho que ahora nuestros políticos y gobernantes intenten volver la vista hacia otro lado y darle al runrún del bajar las pensiones, o buscar fórmulas más imaginativas como la del cheque anti-jubilación, les aseguro que esa cantinela tiene los años contados: ¡pues anda que no hay partidas que se pueden recortar del presupuesto del estado para sufragar el déficit de nuestro sistema de pensiones, entre ellas, y sin ir más lejos,  la de los enormes gastos que nos generan ellos mismos, nuestros políticos, que a falta de una, ya tenemos 4 vicepresidentas, y lo que es peor, por el precio de cuatro, a lo que habría que sumar 18 ministras/os, 1 presidente y más de 1.200 asesoras/es según he leído en los medios! ¡Y ello fijándonos sólo en el Gobierno central, al que habría que añadirle las múltiples periferias, nacionalistas o no, que seguro que también estarán bien cargaditas de personal político-burocrático-administrativo, en muchos casos ocioso, como los de Bruselas, pero bien alimentado, muy bien alimentado! Es sólo un ejemplo, pues estoy seguro que el MOJUPO encontrará muchos setos en los que podar con alacridad y justicia, eso sí, salvo la Sanidad y la Educación, que son pilares básicos de una sociedad avanzada y que seguro que los sabios abuelos del MOJUPO respetarán, para que atiendan a sus cuidados y por el bien de sus nietos.

¡Ah, se me olvidaba, de ese algo más del 50% que les hablaba de nuestros mayores de 50 años en 2031, la mayoría serán mujeres, que en cuanto a salud, y a otras muchas cosas, saben cuidarse mejor que los hombres!

Para que conste a futuro, he dicho.

NOTA: En el próximo artículo les contaré las implicaciones que en los mercados podría tener todo lo que les he mencionado en este artículo de opinión.

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