Mañana veremos a los pesos pesados de la banca central jugar en Fráncfort. Janet Yellen, de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos; Mario Draghi, del Banco Central Europeo (BCE); Mark Carney, del Banco de Inglaterra (BoE) y Haruhiko Kuroda, del Banco de Japón (BoJ) tienen previsto hacer frente a los "retos de la comunicación'' en una conferencia que se celebrará en la sede del BCE.
Creemos que el resultado final será una perspectiva alcista para el dólar estadounidense, en base a la divergencia de políticas y la escalada de los rendimientos. Las monedas de alto beta de los mercados emergentes y los bajos rendimientos del G-10 parecen particularmente expuestos.
La orientación del banco central es clara. Las perspectivas económicas siguen siendo positivas: las condiciones macro favorables con inflación moderada sugieren que una reducción del flujo de dinero no va a suceder, excepto en Estados Unidos, que probablemente tenga un próximo incremento en diciembre.
Yellen y su sucesor, Jerome Powell, deberían permanecer delante de la curva de inflación. Mientras tanto, los titulares sobre un conflictivo plan fiscal de EE.UU. probablemente pesen sobre las acciones y afecten negativamente la confianza en el dólar.