Prácticamente sin movimientos se presenta la sesión europea del martes en el mercado de divisas.
Los importantes datos de inflación de la Eurozona y el índice ZEW alemán no alcanzaron, pese a sus mediciones positivas, para cambiar el panorama siquiera del euro, que se mantiene lejos de la zona de 1,37, valor que puede considerarse como el principal soporte de la tendencia alcista actual. La superación de 1,3810 podría nuevamente darle fuerza a la moneda única, aunque parecen escasas las probabilidades de que ello ocurra.
La libra Esterlina presenta una ligera tendencia alcista de corto plazo, no obstante lo cual los rangos de precios en que se mueve son también muy estrechos. La zona de 1,6335 es la resistencia a seguir en las próximas horas, con un soporte firme en 1,6260.
El yen, por su parte, parece preparar un nuevo movimiento a la baja para las horas que siguen. La superación de 103,40 disparará al dólar en contra de la divisa nipona, que está lista para caer de 104 unidades, y buscar la zona de 108, probablemente en las primeras semanas de 2014. El soporte más cercano del par USD/JPY se encuentra en 102,55 en el corto plazo.
Así se pueden enumerar todas las monedas líderes. Sin cambios, y con poca perspectiva de movimientos relevantes para el resto del día.
El motivo, es bien sabido: comienza la octava y última reunión del año de política monetaria de la Reserva Federal. Estos encuentros, en los cuales la tasa de interés ha dejado de ser un elemento de análisis -se cree que podría quedar cercana a cero hasta mediados de 2015-, tienen como principal atractivo la posibilidad o no de que la Fed recorte parte de sus planes de estímulo a la economía.
Los pronósticos sobre si habrá o no recorte en esta reunión son muy cerrados, y ello explica la quietud de las divisas en los últimos días, situación que se extenderá hasta el miércoles pasado el mediodía.
Por el momento, el dato a seguir es el índice de inflación minorista en Estados Unidos a las 8:30 del Este, que podría al menos ofrecer algún atractivo desde los cambios de precios. Y luego, a esperar a la Fed.