La libra esterlina cae en todos los frentes en la sesión europea del miércoles, siendo la nota destacada del día, hasta el momento, en el mercado de divisas.
Los datos de empleo de Reino Unido fueron decepcionantes en octubre, y derivaron, apenas se conocieron, en una baja fuerte de la moneda británica, que se posiciona con tendencia bajista para las próximas horas frente al dólar, el euro y el yen.
Hace pocos meses existía una fuerte expectativa por un alza de tipos de interés por parte del Banco de Inglaterra, que incluso esbozó el Gobernador de la institución, Mark Carney. Sin embargo, desde julio, los datos de la isla británica no favorecen una medida de este tipo, y pareciera que los efectos de la crisis que afecta a la Eurozona se están trasladando, una vez más, a Reino Unido.
La ausencia de otros datos macroeconómicos mantiene sin cambios relevantes al resto de las monedas líderes. El euro, que el martes estuvo a punto de perder nuevamente la cota de 1,24, se recupera lentamente, y al quiebre de 1,2475, primera resistencia desde el actual 1,2465, podría ganar posiciones a 1,2505 y 1,2530, próximos objetivos alcistas de corto plazo.
El yen, en tanto, se aleja de sus nuevos mínimos de 7 años que tocó el martes en 116,10, ante la incertidumbre que existe en términos políticos en Japón. La implementación de un impuesto a las ventas, que promovió el Gobierno de Shinzo Abe en 2013 está ahora en duda, cuando se acercan las elecciones del año próximo. Para el resto del día, sin embargo, el yen podría mantenerse sin cambios de importancia. Solo el quiebre de 115, primer soporte del gráfico de 4 horas, derivaría en una recuperación algo más sustentable de la divisa nipona.
Se destaca también la recuperación del dólar australiano, que tiene un objetivo alcista en 0,88, donde dejó un gap el 31 de octubre pasado. La tendencia del gráfico de 4 horas del cruce AUD/USD presenta una tendencia alcista marcada, aunque antes de llegar a dicha resistencia, deberá superar 0,8775, que representa el 61,8% del movimiento 0,8912/0,8539.
Sin cambios las monedas vinculadas al petróleo, y con el barril que trata de superar nuevamente los 80 dólares, objetivo que le está costando por demás. La onza de Oro, en tanto, no logra confirmar el quiebre de 1170 dólares con claridad, aunque mantiene un tono ligeramente alcista de corto plazo.
Sin datos para tener en cuenta en la sesión americana, una baja de los futuros de los índices bursátiles norteamericanos pueden estar marcando una corrección bajista del dólar para las próximas horas.